El teclado dinámico de Tactus debutará este año como un accesorio para iPad mini

Ricardo Cambre
La empresa Tactus Technology se ha asociado con el fabricante taiwanés Wistron Corporation para llevar al mercado su teclado para pantallas táctiles que aparece y desaparece según convenga. Además de producir la tecnología desarrollada por Tactus, Winstron ha invertido una segunda ronda de financiación en la startup cuyo capital ya suma 13,5 millones de dólares.

El sistema desarrollado por Tactus se basa en una capa que contiene un fluido capaz de reaccionar rápidamente a impulsos eléctricos. Esto permite generar protuberancias que correspondan a la interfaz mostrada en pantalla, ofreciendo así una respuesta táctil a los dedos del usuario como si de un teclado físico se tratara.


La primera implementación para el consumidor de la revolucionaria tecnología llegará en forma de carcasa protectora para el iPad mini durante el presente año, todavía sin más detalles acerca del diseño exacto del accesorio. Después de la carcasa para iPad, Tactus planea lanzar una tableta que incluya esta tecnología a principios de 2015.

"Los usuarios seguirán escribiendo en las pantallas tal como hacen ahora, pero con más rendimiento, confianza y satisfacción", dice el CEO de Tactus, Craig Ciesla. "Nos encontramos al comienzo de lo que esperamos que sea una sociedad de varios años, donde la solución de Tactus llegará a múltiples mercados, empezando por la computación móvil".

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Winstron Technology ha fabricado productos para algunas de las mayores empresas de tecnología de todo el mundo, incluyendo a Microsoft, Apple, BlackBerry o Acer. Ciesla adelanta que ambas empresas ya están trabajando de forma conjunta en diversos prototipos que incluyen la tecnología de teclados táctiles dinámicos.

Recientemente Tactus contrató los servicios de una compañía externa para llevar a cabo un estudio de usabilidad en su sistema, mostrando que dos tercios de los usuarios en estudio preferían escribir con la solución de la empresa. Esta tecnología no se limita a cambiar la forma en la que se escribe en un dispositivo, sino que también podría revolucionar la precisión del control de videojuegos en aparatos móviles.