Pues otro terminado al 100%. 64 horas de juego.
Impresiones muy parecidas a las de
@Mistyc.El primer acto se me hizo bastante duro. Intentaba explorar, pero notaba que me faltaban habilidades clave, así que al final decidí centrarme en avanzar. Es un acto bastante lineal en realidad. Cuando llegué al combate contra la
, lo pasé fatal: estuve más de una hora atascado. No usaba bien las herramientas ni las habilidades, y tampoco tenía trabajada la build. Con la
fue más o menos lo mismo. Terminé el primer acto bastante frustrado, hasta el punto de plantearme dejarlo aparcado un tiempo.
Pero el segundo acto fue otra historia: mucho más llevadero y entretenido. La exploración se volvió más abierta, empecé a sentirme más cómodo y a notar que iba mejorando. Cuando conseguí el doble salto, fue cuando empecé a disfrutar de verdad.
Aquí tengo que reconocer que empecé a seguir un mapa. Aunque alguno crea que no es lo ideal, fue justo cuando más lo disfruté: consiguiendo herramientas, habilidades y artefactos, limpiando zonas… incluso así me seguía dejando cosas atrás.
Desde ese punto, los jefes ya no se me hicieron tan frustrantes. Algunos, como
, me sorprendieron porque los vencí con relativa facilidad. Incluso el jefe final del segundo acto, que pensaba que me iba a llevar horas, lo derroté al tercer intento.
En el acto 3, el combate contra
me encantó. Me parece de lo mejor que he jugado en un juego 2D: intenso, desafiante y muy bien diseñado. Eso sí, algún jefe que parecía más sencillo, como
, me costó más de lo que esperaba por confiarme demasiado.
El premio al momento más desquiciante se lo lleva la parte final del parkour para llegar a
. No sé qué me dejó más tocado, si eso o el Palacio Blanco del primer Hollow Knight. También la salida del
se me atragantó bastante. Y el jefe final fue duro: estuve más de una hora probando builds y herramientas hasta encontrar la que mejor se me adaptaba.
También quiero destacar lo bien que vienen algunas zonas más relajadas y preciosas, como
. Se sienten como un respiro de aire fresco tras tanto estrés acumulado.
En resumen, es un juego que pone a prueba tu habilidad, pero que también ofrece recursos y opciones para ayudarte en los combates. A partir de cierto punto, el uso inteligente de habilidades y herramientas cobra mucho peso. El plataformeo es variado, con retos puntuales que pueden desesperar, y los jefes son muy diversos. Creo que el primer acto es el más exigente, porque aún no tienes suficientes herramientas ni el control necesario, pero luego te vas adaptando: aprendes a estudiar a los jefes y a usar lo que el juego te da para hacerles frente. Algunas habilidades están bastante rotas, eso sí.
Me quedaría sacar el bestiario y minijuegos que no creo que me aporte nada, no me apetece matar un bicho 15 veces o saltar sobre una pulga 50 veces.
Aunque hasta el final dudé si colocarlo por encima de Hollow Knight, creo que es un juego superior. Eso sí, no tiene ese toque de frescura o sorpresa del original. Se nota que bebe mucho de Hollow Knight, pero lo mejora en muchos aspectos. No inventa nada nuevo, y por eso quizá no lo pondría como GOTY, pero desde luego, por el precio que tiene y la calidad y diversión que ofrece, es un auténtico regalo.