Aunque la producción de semiconductores de Samsung está centrada en productos como chips de memoria para módulos RAM y sistemas de almacenamiento (con los proyectos bajo contrato cobrando cada vez más relevancia), el fabricante surcoreano tiene también un buen negocio en la venta de sensores CMOS para teléfonos móviles, tabletas y plataformas de reconocimiento de imágenes, mercado en el que rivaliza con Sony.
Y si bien Samsung compite desde una posición inferior con respecto a los japoneses, que ha logrado meter sus sensores en toda clase de productos, la progresión técnica de la firma ha sido notable. En poco más de un año ha roto varios récords de resolución, saltando de los 64 megapíxeles al diseño de sensores de 108 megapíxeles en colaboración con socios comerciales como Xiaomi, y ahora sabemos que su nueva meta se encuentra en los 600 megapíxeles.
Yongin Park, director de negocio de la división de desarrollo de sensores de Samsung, así lo ha dejado caer en una columna donde habla sobre algunos de los retos que se han marcado para el futuro. Uno de ellos es lograr lo que Park describe como "600 megapíxeles para todo el mundo", superando así los 576 megapíxeles teóricos del ojo humano (un cálculo comúnmente aceptado, pero difícil de equiparar por la forma en la que trabajan los conos y bastones del ojo, inasimilables a un sensor digital, por no hablar del procesamiento realizado por nuestro cerebro y circunstancias como la fóvea).
Lo que el ejecutivo no aclara es cuándo veremos los primeros sensores de 600 megapíxeles ni cómo conseguirán alcanzar esta resolución, puesto que una cosa es el número de puntos capturados por el sensor de imagen y otra que realmente los pueda plasmar en un archivo 1:1, lo cual requeriría chipsets con un procesador de imagen (ISP) radicalmente más potente que los diseños actuales y una capacidad de almacenamiento más que importante. Como referencia, una imagen sin comprimir de 600 megapíxeles 16:9 (32660 x 18371) se acerca a los 5 GB dependiendo de la profundidad de color. También se plantean muchas dudas en lo que se refiere al tamaño del sensor y la tecnología utilizada.
Dicho todo esto, aunque Park hable de 600 megapíxeles "para todo el mundo", no está claro que dichos sensores vayan a estrenarse necesariamente en teléfonos móviles. En ese sentido resulta interesante el hecho de que Park señala en su columna que los ingenieros de la empresa también están trabajando en "otros tipos de sensores" que nada tienen que ver con la imagen, como los diseñados para "registrar olores o sabores".
