Según ha señalado la propia Microsoft a través de su blog oficial, los desarrolladores interesados en esta posibilidad tienen la oportunidad de sumarse a la conocida como "plataforma de orquestación de Windows Update", una nueva solución que permitirá actualizar cualquier tipo de programa o driver.
Por ahora esta iniciativa es una preview privada y se desconoce cuándo ampliará su alcance.
De acuerdo con la descripción oficial de Microsoft, la plataforma de orquestación de Windows Update parece centrarse en herramientas empresariales, aunque en un principio estará abierta a todos los desarrolladores, que podrán aprovechar la oportunidad para entregar sus últimas actualizaciones en base a criterios como la actividad del usuario o el estado de la batería del ordenadore receptor.
El tipo de programas soportados incluye MSIX/APPX, pero también habrá compatibilidad para implementaciones personalizadas de Win32. En el lado del cliente, las actualizaciones se podrán consultar a través de un historial, y si lo consideran necesario, los administradores podrán definir fechas límite para la instalación.
Como bien señala The Verge, esta no es la primera vez que Microsoft intenta simplificar la instalación de actualizaciones de software de terceros. Ya hace cinco años la compañía lo intentó con Windows Package Manager, pero su acogida fue bastante tibia. Queda por ver si este nuevo intento llega más lejos, algo que posiblemente dependerá de las ganas que tengan otras compañías de desprenderse de sus actuales canales de distribución de actualizaciones, cada vez más ligados a plataformas de venta propias.