Con estos cuatro títulos alcanzando cifras como los 1,5 millones de dólares de ingresos al día o los más de 100 millones de jugadores simultáneos y su muy longeva presencia en las listas de éxitos de las stores, el estudio se convirtió en una fruta muy atractiva que a finales de 2013 le valió la adquisición por parte de Softbank, un conglomerado japonés que elevó su valoración hasta cerca de los 5.000 millones de euros. Hoy sabemos que este grupo ha decidido vender sus acciones por unos 8.600 millones de dólares al gigante chino Tencent, propietario de Riot (el desarrollador de League of Legends), la red de distribución de contenidos QQ y WeChat entre otros activos.
Desde Tencent han prometido formalmente mantener la aproximación del anterior propietario hacia el estudio filandés, que conservará el control de sus operaciones, su cuartel general en Helsinki y su personal. Adicionalmente al 73% del accionariado que recibe de Softbank, la compañía china permitirá a todos los empleados vender o seguir obteniendo rendimientos de las acciones con las que cuentan, una de las varias políticas que ha convertido a Supercell en una compañía muy popular en la industria.
Los principales ejecutivos del estudio finlandés fueron noticia también hace un mes por su aproximación transparente al pago de impuestos, que supuso tras la operación de Softbank un incremento aproximado de un quinto en la recaudación total del equivalente al impuesto de rendimientos de capital del país. Entre los jugadores, la popularidad de sus títulos se mantiene mucho tiempo después de su lanzamiento por la variedad del contenido, el soporte a largo plazo y una aproximación a los micropagos menos incómoda que en muchos rivales.
En otro orden de cosas pero siguiendo con los movimientos financieros multimillonarios, Vivendi anunció recientemente que ya controla más del 20% de las acciones de Ubisoft. Hemos hablado en múltiplesocasiones ya sobre la peculiar relación entre el conglomerado francés y la desarrolladora/distribuidora que cumple ya 30 años y este último parece ser un paso más hacia el futuro que en Ubi tratan de evitar.
Durante la conferencia de la compañía en el E3 pudimos ver a su fundador Yves Guillemot llevar a cabo una apasionada declaración de intenciones en la que la "búsqueda de libertad" trascendía a las aventuras de Ezio o Marcus que veíamos en pantalla; ahora Vivendi declara abiertamente que superando el 17% de los derechos a voto en el comité de la empresa esperan poder recomponer su equipo directivo para obtener una representación proporcional.
Entre los otros interesantes detalles en la nota de prensa de Vivendi se encuentra su declaración de no pretender adquirir el control de la compañía (según la legislación francesa deberían lanzar una OPA en caso de superar el 30% de las acciones), la intención de establecer una cooperación fructífera y la afirmación de no estar cooperando con un tercero para llevar a cabo esta operación.