Slightly Mad, equipo de desarrollo conocido por la franquicia Project Cars, trabaja en una consola independiente conocida bajo el nombre de Mad Box. La idea fue presentada a inicios de año y desde entonces muchos dudan de su viabilidad, sensación que ahora se ha instalado en la propia Slightly Mad. El motivo de este pesimismo se llama Stadia, el servicio en la nube de Google que promete juegos en streaming a 4K y 60 FPS.
“Teníamos una sólida inversión inicial, pero Google dijo que ‘el futuro de los videojuegos no es una consola’ y eso no nos ha hecho ningún favor”, dice Nathan Bell, director de marketing de Slightly Mad, en una conversación con PC Games Insider. “Dos inversores se retiraron después del anuncio de Stadia. Todo lo que puedo decir en este momento es que el futuro del proyecto es cuestionable”.
Por ahora Mad Box es un castillo en el aire. Cuando Slightly Mad anunció el proyecto prometió la consola “más potente jamás hecha” con capacidad de ejecutar juegos de realidad virtual en 4K y 90 FPS (180 FPS de forma interna). También se mostró su aspecto, aunque después Ian Bell, director ejecutivo de Slightly Mad Studios, decidió cambiar el diseño debido al feedback recibido vía Twitter. Si el proyecto termina saliendo adelante previsión es que Mad Box esté disponible dentro de tres años por un precio aún no revelado.
Slightly Mad no solo tiene problemas de financiación para sacar adelante su consola. Recientemente se ha descubierto que la compañía había retirado la petición para registrar el nombre Mad Box ante la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO por sus siglas en inglés). Quien ha causado esta situación es Madbox, un desarrollador francés dedicado a los juegos casuales que teme confusión debido a la similitud de los nombres. Actualmente en Slightly Mad se está discutiendo la posibilidad de cambiar el nombre del dispositivo.
