El movimiento MeeToo dentro de la industria del videojuego tiene en Ubisoft uno de sus principales epicentros. Cinco años después de que una investigación descubriera que en las oficinas de la compañía dirigida por Yves Guillemot se había
creado un ambiente hostil hacia las mujeres, un tribunal francés ha declarado culpables de permitir una cultura de acoso sexual a tres antiguos ejecutivos del editor: Thomas François, Serge Hascoët y Guillaume Patrux.
Durante el juicio el tribunal escuchó que entre 2012 y 2020 las oficinas de la empresa en Montreuil, una aglomeración urbana de París, estuvieron regidas por una cultura tóxica de acoso y sexismo que uno de los testimonios describió como "un
boys club por encima de la ley". Las mujeres denunciaron que se hacían comentarios sexuales con regularidad sobre su cuerpo y ropa, las llamaban feas o putas, les decían que llevasen faldas más cortas o que adelgazaran y los altos cargos les hacían gestos obscenos. A las que mostraban su desaprobación les decían que "no eran divertidas" y que les faltaba tener más sexo.
Thomas François, exvicepresidente editorial de Ubisoft, ha sido declarado culpable de acoso sexual, acoso psicológico e intento de agresión sexual. Se le impone una pena de tres años de prisión condicional y una multa de 30.000 euros. Serge Hascoët, antiguo director creativo de Ubisoft y mano derecha de Guillemot, ha sido declarado culpable de acoso psicológico y complicidad en el acoso sexual. Su condena es de 18 meses de prisión condicional y una multa de 45.000 euros. Al director de juego Guillaume Patrux se le impone una pena de prisión condicional de 12 meses y una multa de 10.000 euros por acoso psicológico.
Tras una investigación por agresión y acoso sexual, Thomas François, Serge Hascoët y Guillaume Patrux, fueron
arrestados por la policía francesa en 2023 junto a otros dos empleados. Antes y después del juicio los tres exejecutivos han negado los cargos. El abogado de Hascoët asegura que su cliente está considerando presentar una apelación. Los tres condenados fueron
despedidos o dejaron Ubisoft después de que saliera a la luz que en en la compañía existía un ambiente hostil hacia las mujeres que toleraban o del que formaban parte.
La abogada de una de las partes afectadas ha calificado la sentencia como buena para hoy y el futuro. En su opinión el tribunal ha mandado a las empresas un mensaje de que "cuando hay una gestión tóxica, los directivos deben rendir cuentas y los empleados ya no pueden dejarlo pasar"
Fuente: theguardian