Realmente oportunidad nunca hubo, las dificultades, barreras y obstáculos siempre habrían estado ahí, y Sony oponiéndose a la compra fue más una jugada que otra cosa. La compra de ABK ha sido cara a muchos niveles, no solo económicos, pero de otro manera no habría sido posible.
Debieron quedarse en ZeniMax y no ser tan avariciosos.