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DonutsNeverDie escribió:¿A ambos? Yo todavía no he visto presionar a Putin ni un poco...
654321 escribió:DonutsNeverDie escribió:¿A ambos? Yo todavía no he visto presionar a Putin ni un poco...
Amenazó con sanciones a los paises que les comprasen petroleo, y mas cosas me suena ... y está presionando para que el precio de petroleo sea bajo, que le jode mucho a rusia.
Residentes cerca del lugar donde ayer se produjo un ataque aéreo ruso contra un edificio privado en Járkiv (Ucrania). EFE
De todos los pendulazos argumentales que Donald Trump ha dado en la negociación de ocho meses por la paz con Vladimir Putin, que van de llamar al ejército ruso "tigre de papel" hasta definir a Zelenski como un "dictador sin elecciones", ahora ofrece uno cuya música no le suena mal a la Unión Europea. Se trata de congelar la guerra "sobre las líneas de combate actuales", exactamente lo que el rubio presidente de EEUU dijo 24 horas después de la reunión del pasado viernes, en el Air Force One, contradiciendo lo que él mismo había dicho en la Casa Blanca a la delegación ucraniana, a la que presionó para entregarle la región de Donetsk a Putin. Depende de con quién hable antes, el magnate defiende una cosa o la contraria.
¿ZELENSKI ESTARÍA DE ACUERDO?
El presidente de Ucrania podría tragarse ese sapo si con ello llega la paz (aunque todos en su país creen que sería una paz precaria), pero no reconocería de iure esos territorios ocupados como rusos, aunque sí de facto. Ese es el límite al que van a llegar los ucranianos, que no están dispuestos a regalar ninguna región a Moscú que no haya sido conquistada militarmente.
¿ES UNA POSICIÓN FIRME TANTO DE WASHINGTON COMO DE BRUSELAS?
No, porque Washington siempre ha estado más cerca de comprar la narrativa del Kremlin, que exige rendir todo el Donbás para alcanzar un alto el fuego, y la volatilidad del presidente de EEUU es mayor que la de las criptomonedas. En cuando a Europa, desde el principio ha seguido las directrices de Washington sin definir un solo plan propio y realista de apoyo a Ucrania y para doblarle el brazo a Rusia y obligarla a sentarse en la mesa de negociaciones con propuestas sinceras.
¿TIENE RUSIA UNA INTENCIÓN DE NEGOCIAR LA PAZ?
No, Moscú persigue la victoria que no ha conseguido en el campo de batalla y ya no lo disimula. Ayer, Sergei Lavrov, ministro de Exteriores ruso, aseguró que Rusia no iba a aceptar ningún alto el fuego porque eso supondría "darle alas a un régimen nazi" y a un "Gobierno ilegítimo". Es decir, que más allá del teatro que Putin representa para ganar tiempo, el propio Kremlin reconoce que su intención es que la invasión continúe hasta que se cumplan sus objetivos, que pasan por acabar con la soberanía de Ucrania como país independiente. Mientras Putin sea capaz de llamar a Trump y masajear su ego para tumbar todo el trabajo diplomático de sus aliados, el tiempo va a seguir corriendo a su favor y los soldados de ambos bandos muriendo.
SI RUSIA NO QUIERE ACABAR CON LA GUERRA, ¿ENTONCES A QUÉ JUEGAN MOSCÚ Y BRUSELAS?
Ambos son conscientes de que no hay una zona de común acuerdo. Rusia pide cosas imposibles de otorgar (lo que llaman "las razones profundas de la guerra") cuando aún no ha ganado ninguna guerra y los bandazos de Trump son como una montaña rusa (nunca mejor dicho). Es el presidente estadounidense un hombre al que en realidad Ucrania le importa bastante poco y que sólo ve la guerra como un impedimento para tejer sus negocios y sus relaciones comerciales, como deja claro en cada mensaje de su red social. Pero tanto Europa como Putin quieren atraerlo hacia sus intereses. Putin, para ganar tiempo, frustrarlo y desconectarlo de la ayuda a Ucrania, para que se desentienda definitivamente, cosa que poco a poco va consiguiendo. Los aliados europeos buscan todo lo contrario, que su Administración se implique mucho más en la presión económica y bélica contra Rusia.
¿QUÉ PINTA ESPAÑA EN TODO ESTO?
Pues cada vez menos. Que Pedro Sánchez se haya desconectado del compromiso firmado del 5% en Defensa para converger con la OTAN lo ha alejado de sus socios europeos, mientras que no está presente tampoco en la compra de armamento de EEUU para Kiev y no se le espera con medidas tangibles en la llamada Coalición de Voluntarios. Más allá de las palabras, el apoyo militar español a Ucrania se va diluyendo en el peor momento.