No está mal. Se está compitiendo, se está jugando mucho mejor que el rival y pese al árbitro se termina la primera parte ganando. La diferencia sobre el campo debería de ser de más goles pero no se ha querido que fuese así desde arriba.
Ahora viene lo difícil, la segunda parte, que no se les dan bien las segundas partes y no descarto nada, ni desde que los jugadores bajen y nos remonten ni que el árbitro tenga órdenes de ayudar aún más.