Los 15 primeros minutos han sido muy buenos y auguraban muy buen partido, pero entre que el Barça ha bajado la intensidad, o el Girona ha encontrado como bajarsela buscándole la espalda el partido ha cambiado de rumbo y ha generado dudas, parece que los jugadores se iban nerviosos a vestuarios.
Lamine por otra parte en esos balones al segundo palo sin Raphinha no tienen tanto sentido, Rashford no es ese jugador, a ver si en el descanso se lo hace saber.