Balatro es un título de construcción de mazos roguelike basado en el póker donde hay que combinar manos válidas del mencionado juego de naipes (doble pareja, escalera, color…) con comodines para crear sinergias y ganar la partida. Todo empieza con una baraja tradicional de 52 cartas y una simple premisa: a cada mano se le asigna una puntuación y un multiplicador. En todas las rondas se reparten ocho cartas y se pueden jugar cuatro manos para intentar conseguir las suficientes fichas como para superar la puntuación del crupier.
Con las cartas en la mano, los jugadores deben decidir qué hacer con ellas en función de las fichas necesarias para ganar al crupier. El primero pide 300 fichas. Si la mano es floja existe la opción de consumir uno de los tres descartes de hasta cinco cartas para pedir de nuevas con la esperanza de recibir una mano mejor. Conformarse con la mano o gastar un descarte es una de los minijuegos que Balatro obliga hacer constantemente. Hasta aquí no hay demasiada diferencia con el póker tradicional y para cambiar esto tenemos los comodines.
En Balatros las fichas no se cambian por dinero, sino que sirven para comprar cartas especiales, incluyendo cartas de tarot para encantar el mazo, cartas planetarias para mejorar los multiplicadores y comodines, que gracias a sus poderes son los principales responsables de revolucionar las partidas debido a que permiten aumentar la puntuación. Las fichas necesarias para ganar al crupier aumentarán constantemente, así que liberar combos y potenciar al máximo las manos y cartas será necesario para superar a los rivales.
Además de la baraja estándar de póker, Balatros cuenta con 150 comodines con habilidades únicas, 15 barajas con modificadores para elegir en cada partida, 22 cartas de tarot con capacidad para mejorar las cartas habituales, 11 cartas planetarias para subir el nivel de las manos y 32 cupones con ventajas permanentes. La crítica ha aprobado el título con una nota media de 92 en Metacritic y 94 en OpenCritic.