Según la demanda de Samsung, Nvidia habría violado seis de las ocho patentes en disputa mientras que Velocity Micro las habría infringido todas. Entre las tecnologías defendidas figuran sistemas técnicos como controles de caché y sistemas físicos como métodos de anclaje. Esto explicaría el menor número de acusaciones sobre Nvidia al no fabricar semiconductores de forma directa.
Por otra parte, la demanda alega que Nvidia habría utilizado tácticas de marketing engañosas en la promoción del Tegra K1 de la tableta Shield, que la firma americana tilda como "el procesador móvil más rápido del mundo". Concretamente, Samsung ha señalado un benchmark comparativo que utiliza el chip Exynos 5433 del Note 4 para mostrar la supuesta superioridad del K1.
Nvidia no ha tardado en contestar a la contrademanda desde su blog, mostrando una vez más el benchmark supuestamente engañoso. La compañía asegura que las acusaciones de Samsung sobre el rendimiento de su procesador son falsas y que las pruebas se han realizado con una "configuración de fábrica mediante software disponible de forma pública".
En el mismo mensaje, Nvidia lamenta la involucración de su socio Velocity Micro en la batalla legal: "Teníamos la certeza de que nos responderían con otra demanda. Es una táctica predecible. […] Es desafortunado que Samsung haya demandado a Velocity. Esta no es su lucha".