Game over: Juego de Tronos afronta su última temporada

Benzo
La madrugada del lunes 15 de abril viviremos el inicio del fin del mayor acontecimiento seriéfilo de la historia: la temporada final de Juego de Tronos. Después de 67 capítulos solo nos quedan 432 minutos de metraje repartidos en seis episodios, que se emitirán a lo largo de media docena de semanas, para saber cómo termina la serie. Con HBO (también se verá en Movistar+) no hay maratones que valgan y la historia se comentará semana a semana. En todo el mundo cada lunes se hablará de lo sucedido la noche anterior, a excepción de que como un servidor esperes a que concluya la temporada para verla entera. Esta vez será más difícil que nunca no caer en el campo de minas en forma de spoilers.

Cuando termine Juego de Tronos nos quedaremos huérfanos. No será la primera ni la última vez. Pasó con Los Soprano, Breaking Bad, The Americans, The Wire y otras pocas más. Pero bien está lo que bien acaba. Desde el inicio, los showrunners David Benioff y D.B. Weiss trazaron una plan y lo han ido siguiendo independientemente del éxito de la serie. Primero tenían como base los libros de George R. R. Martin, después su consejo y directrices. El escritor siempre ha apoyado a los creadores de la serie, aunque él explicará su versión de la historia mediante los dos libros que aún quedan por completar la saga Canción de Hielo y Fuego. Un hecho pocas veces visto, una serie que avanza a la obra literaria en la que se basa.

A los lectores de paciencia infinita solo nos queda esperar a que la salud respecte a Martin para que pueda terminar las novelas. La primera (Juego de Tronos) se publicó en 1996, la quinta y por ahora última (Danza de Dragones) en 2011. Seguiremos esperando. Con Martin solo sabemos que el libro se pondrá a la venta cuando esté terminado. Mientras tanto, miraremos la serie.

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¿Comenzamos?

¿Dónde nos dejó la séptima temporada de Juego de Tronos?
A partir de aquí el texto está lleno de spoilers sobre toda la serie

La séptima temporada de Juego de Tronos empieza con Bran Stark llegando por fin a Invernalia como el Cuervo de los Tres Ojos. Ahí consigue reunirse con su hermana Sansa, que recientemente ha visto a Jon Nieve ganar La batalla de los bastardos con la ayuda de Petyr Baelish y los caballeros del Valle de Arryn. La pequeña de los Stark, Arya, se encuentra camino a Desembarco del Rey para tachar a Cersei Lannister de su lista, pero cambia de dirección y pone rumbo al norte cuando se entera de que Jon Nieve reina en Invernalia. En Poniente solo Bran Stark lo sabe, pero todos los espectadores estamos al tanto de que Jon es el sobrino de Daenerys, un parentesco que puede ponerles en un aprieto viendo cómo acaba esta temporada. Sin embargo, hay que tener en cuenta que durante siglos los Targaryen se han emparejado entre familiares.

Después de seis temporadas finalmente Daenerys Targaryen ha cruzado el Mar Angosto para reclamar el Trono de Hierro. Su primera parada es la fortaleza Rocadragón. Esta era la casa de los Targaryen hasta que fue tomada por Stannis Baratheon a petición de su hermano Robert Baratheon durante la Rebelión de Robert, conflicto también conocido como la Guerra del Usurpador. Unos hechos anteriores a Juego de Tronos que tienen una vital importancia por lo que hemos vivido en la serie. Daenerys llega con los deberes hechos. A los inmaculados, dothrakis y el trío de dragones, hay que sumarle el apoyo de Tyrion Lannister, Yara y Theon Greyjoy, Ellaria Arena y Olenna Tyrell. Además, aparece Melisandre para recomendarle una reunión con Jon Nieve.

Al hasta ahora bastardo de los Stark lo tenemos en Invernalia y su única gran preocupación siguen siendo los Caminantes Blancos. Para poder combatirlos recurre a Daenerys, se reúne con ella en Rocadragón y no sin pocas dificultades logra convencerla para que le preste ayuda en el norte. Por su parte, en Invernalia las hermanas Stark juegan con los espectadores y Baelish, que terminará degollado al intentar enfrentarlas. Ha costado, pero finalmente Meñique ha pagado por la traición a Eddard "Ned" Stark.

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- Habéis demostrado ser el mejor capitán de los 14 mares. Y un buen amigo de la corona.
- Merecéis algo más que un buen amigo.

Mientras la alianza Stark - Targaryen se empieza a forjar, en Desembarco del Rey la embarazada Cersei Lannister llega a un acuerdo con Euron Greyjoy, nuevo gobernador de las Islas del hierro en detrimento de sus sobrinos (Yara y Theon) y capitán de Flota de Hierro. A cambio de su apoyo Euron le pide a Cersei que se casen una vez termine la guerra. Esta acepta y él se lo cree. La primera acción de Euron es asaltar el barco en el que viajan Tyene y Ellaria Arena y los hermanos Greyjoy. Euron mata dos pájaros de un tiro. Por un lado captura a Ellaria, que envenenó y causó la muerte de Myrcella Baratheon, y su hija Tyene. Por otro apresa a su sobrina Yara. Durante el combate Theon huye. En cualquier caso, la venganza de Cersei está servida. Encadena a madre e hija en las mazmorras y decide envenenar a Tyene con un beso, el mismo método que Ellaria utilizó con Myrcella. Ellaria se quedará encadenada para ver morir y descomponerse a su hija.

Sin embargo en casa Lannister las alegrías duran poco, pues Cersei tiene esperando a Tycho Nestoris, representante del Banco de Hierro de Braavos, que viene a reclamar el dinero que se le debe, que no es poco. Cuando la deuda esté saldada, el banco estará dispuesto a prestar más oro. Pero como es habitual Cersei ya tiene un plan en mente para atar este cabo suelto y alguno más.

Antes de emprender el camino hacia el norte Daenerys busca mandar un mensaje y decide asaltar Roca Casterly, el histórico asentamiento de la casa Lannister. La sorpresa llega cuando sus tropas conquistan fácilmente el castillo, pues este está completamente vacío y sin suministros. Los Lannister ya habían anticipado la jugada de la Targaryen, así que decidieron abandonar su histórico emplazamiento para asaltar Altojardín, saquear su oro para pagar al Banco de Hierro de Braavos y de paso llevarse por delante a Olenna Tyrell, a la que Jaime Lannister permite morir envenenada. Su último aliento lo utiliza para lanzar una bomba: fue ella quien mandó envenenar a Joffrey Baratheon.

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- Volved a Desembarco.
- No abandono a mi ejército.
- Sois su comandante, no un puñetero infante. Esos cabrones nos van a barrer.

Cuando Daenerys se entera de la jugada de Cersei manda a todo su ejército, inmaculados, dothrakis y dragones incluidos, ha interceptar la caravana Lannister. La batalla es una carnicería y una demostración del poderío de los dragones, que sin embargo demuestran su vulnerabilidad ante una inmensa ballesta que consigue herir a uno de ellos. Cuando termina la contienda Randyll y Dickon Tarly quedan a merced de Daenerys, que les ofrece la opción de aceptarla como reina. Ambos la rechazan por ser una invasora extranjera, una decisión que les cuesta la vida. Salvo novedad, estas muertes nos dejan a Samwell Tarly como heredero de casa Tarly. Este no se entera de nada, pues se encuentra en la Ciudadela de Antigua tratando la peste gris de Jorah Mormont, que finalmente se recupera y vuelve a los pies de Daenerys para ser aceptado de nuevo. Posteriormente, Sam también decidirá abandonar la ciudad.

Este primer combate entre las fuerzas Lannister y Targaryen es un punto de inflexión. Tanto es así que Tyrion Lannister se juega el pellejo entrando a escondidas y con la ayuda de Bronn a Desembarco del Rey para reunirse con su hermano Jaime. El objetivo es concretar una reunión entre Daenerys y Cersei para que esta última sea consciente de la amenaza que llega desde más allá del Muro. Durante su escaramuza el enano aprovecha para llevarse a Gendry, uno de los bastardos de Robert Baratheon que logró sobrevivir a la purga de sus hermanastros durante la segunda temporada y posteriores aventuras.

Volviendo al norte, tenemos a Jon Nieve organizando un equipo para salir de cacería y atrapar un espectro. El objetivo es mostrárselo a Cersei. El grupo de Nieve lo componen Gendry, Davos Seaworth, Jorah Mormont, Tormund Matagigantes y los miembros de la Hermandad Sin Estandartes (que hasta entonces habían acompañado a Arya), incluyendo al resucitado Beric Dondarrion, el sacerdote rojo Thoros de Myr y Sandor “el perro” Clegane. No todo sale como se esperaba, así que ante la dificultad de salir con vida de ahí Gendry corre en busca de Daenerys, que termina apareciendo a lomos de sus dragones para despachar a base de fuego a los Otros. Sin embargo, todo cambia cuando entra en escena el Rey de la Noche, que usa una lanza de hielo para derribar a Viserion. El dragón termina hundido en un lago helado. Durante el enfrentamiento Jon Nieve queda rezagado y cuando todo parecía perdido aparece Benjen Stark, el hermano de Ned Stark, con un aspecto bastante demacrado. Jon Nieve logra regresar hasta el Muro.

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De no haber ido, no lo habría visto. Hay que verlo para creerlo. Ahora lo creo.

Finalmente la esperada reunión entre Daenerys y Cersei se celebra y en ella se muestra al caminante capturado. Cuando lo ve Euron Greyjoy decide agarrar sus portantes y volver por donde ha venido. Cersei, que parece debilitada por la huida de Euron, afirma que aceptaría una tregua a cambio de que Jon Nieve se mantenga neutral de cara a una futura guerra, pero este se niega y ahí mismo vuelve a reconocer a Daenerys como única reina. La Lannister decide abandonar la reunión sin alcanzar ningún acuerdo, pero posteriormente, después de reunirse con su hermano Tyrion, vuelve para terminar aceptando una tregua y mandar su ejército al norte. Solo pide que una vez se termine la Gran Guerra su gesto se tenga en cuenta. Sin embargo, a estas alturas todos deberíamos saber que Cersei es la reina de los teatrillos.

El único motivo por el que Euron deja la reunión es para ir a buscar a la Compañía Dorada en las Ciudades Libres (Essos) y Cersei no tiene ninguna intención de mandar a sus hombres al norte. Su plan consiste en unir a los mercenarios y su propio ejército para atacar a las tropas Targaryen mientras estén luchando contra los Caminantes Blancos. Una visión que Cersei decide compartir con su hermano y amante Jaime, que la abandona por no apoyar su estrategia de engaño. Cersei está tan decidida en su empeño que en un momento dado parece dispuesta a permitir que Gregor “la montaña” Clegane despache a Jaime.

La séptima temporada de Juego de Tronos termina con Daenerys encamandose con Jon Nieve. Esta sería una buena forma de forjar una alianza en las tierras de Poniente, pero como ya sabemos son tía y sobrino. Jon Nieve es hijo de Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark, lo que le convierte en un legítimo heredero al Trono de Hierro. No tendrán mucho tiempo de discutirlo, pues a las puertas del Castillo Negro ya tenemos a la legión de caminantes blancos capitaneados por el Rey de la Noche, que ha levantado a Viserion como una vermis de escarcha. Su primera acción a lomos del dragón consiste en destruir parte del Muro que los separa del resto de Poniente.

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Los obscuridad llega para todos. La afrontaremos juntos. Y cuando la Gran Guerra acabe, tal vez recordéis que decidí participar. Sin promesas ni seguridades por parte de nadie. No las espero.

¿Quién se terminará sentando en el Trono de Hierro?

Es la pregunta del millón que personalmente quiero resolver mirando la serie, no viendo tráileres o elucubrando sobre qué pasará. Todas y cada una de las anteriores temporadas nos han preparado para este momento. A lo largo de todo este tiempo todos los personajes de Juego de Tronos se han ido posicionando, con mejor y peor acierto, para tener la oportunidad de sentarse en el Trono de Hierro o como mínimo poder estar al lado de quien lo haga. Este símbolo del poder es el objeto más codiciado de los Siete Reinos y muchos, de forma directa o indirecta, han muerto por él. También hemos podido comprobar que el Trono de Hierro no es cómodo ni garantía de seguridad, pues cualquiera te puede traicionar con tal de quitarte del sitio.

El Trono de Hierro está hecho con las espadas fundidas de los enemigos de Aegon I, fundador de la dinastía Targaryen que durante cerca de 300 años reinó Poniente hasta que subió al poder Aerys II, cuya locura dio inicio a la Guerra del Usurpador que se llevó por delante a su heredero Rhaegar Targaryen. Aunque antes de morir tuvo tiempo de casarse con Lyanna Stark y engendrar un hijo: Jon Nieve. Acabado el conflicto ocupó el Trono de Hierro Robert Baratheon, que después de su “accidente” de caza dejó el puesto a sus “hijos”. Actualmente quien ostenta el poder sobre Poniente es Cersei Lannister, cuyo apego al trono es igual o incluso superior al que tenía por sus hijos. Si algo ha demostrado Cersei es que no dejará su puesto sin dar batalla y que sacrificará a cualquiera para seguir en su posición.

En cierto modo Cersei defiende el legado de su marido. Robert Baratheon se reveló para quitar el trono a los Targaryen y es Daenerys quien intenta recuperar aquello que su familia perdió. Quien lo evita con más fuerzas que nunca es Cersei, cuyo deseo es el mismo que el de Robert: matar a los Targaryen. Sin embargo los motivos son distintos. Robert Baratheon tenía como objetivo acabar con todos los Targaryen por las acciones de Aerys y por creer que Lyanna Stark, su prometida, fue secuestrada y violada por Rhaegar Targaryen, cuando en realidad vivieron un romance con poco recorrido. Sin embargo, dio su fruto. Cersei lucha por lo único que queda: ella misma y próximo hijo.

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Se llama Aegon Targaryen. Debes protegerlo. Prométemelo, Ned.

A pesar de que el gran público hemos reducido la lista de candidatos al Trono de Hierro a tres o cuatro nombres entre los que se incluyen Daenerys Targaryen, Cersei Lannister y el Rey de la Noche, desde HBO se ha ampliado la lista. Han propuesto hasta 20 nombres y quizás han pecado de optimistas, pero lo cierto es que en Juego de Tronos no se puede dar nada por seguro. Además de los ya mencionados, entre los candidatos tenemos a: Jon Nieve, Arya Stark, Jaime Lannister, Tyrion Lannister, Sansa Stark, Bran Stark, Brienne de Tarth, Davos Seaworth, Euron Greyjoy, Theon Greyjoy, Jorah Mormont, Gusano Gris, Melisandre, Missandei, Samwell Tarly, Varys y el Perro. Solo uno se sentará en el Trono de Hierro, algunos lo acompañarán y otros morirán.

Sin embargo, antes de saber quién logrará entrar triunfante en la Sala del Trono deberemos ver cómo consigue llegar hasta ahí. A día de hoy ya podemos dar por seguro que el final no gustará a todo el mundo. En cualquier caso, un servidor invita a aceptar el camino y decisión que hayan tomado los creadores, sea la que sea. Hay que tener en cuenta que todo el plan de David Benioff y D.B. Weiss desde la primera y hasta la última temporada ha tenido la aceptación de R.R. Martin. Sin embargo, ambos showrunners se han tomado licencias creativas que pueden gustar más o menos. En cualquier caso, siempre quedará la opción de esperar a los libros, ya que el escritor ha reconocido que él ha podido tomar rutas alternativas y todo apunta que su final será diferente. No unos ni otros conseguirán una conclusión que guste a todo el mundo. Eso es imposible.


El legado de Juego de Tronos

Podrá gustar o no, pero nadie puede negar que cuando termine Juego de Tronos pasará a la historia como la mayor serie jamás creada. Los números, audiencias, nominaciones y premios así lo dicen. HBO ha conseguido sacar adelante un producto que ha subido los estándares de la televisión a todos los niveles, especialmente el de producción, pero también de impacto, audiencia e inversión. Como diría John Hammond en Jurassic Park, “no hemos reparado en gastos”. Además, uno de los grandes logros de Juego de Tronos ha consistido en ser un éxito desde el inicio, un triunfo que ha permitido a HBO dominar el panorama televisivo durante casi una década. Nadie se ha atrevido a programar su serie estrella mientras Juego de Tronos ha estado ofreciendo nuevos capítulos. La tercera temporada de Stranger Things, que llegará en verano, es un ejemplo de ello.

Tan grande ha sido la huella que ha dejado Juego de Tronos que el nombre de la serie ya se ha asociado a un producto de éxito que todas las plataformas de contenido quieren. Todo el mundo busca su Juego de Tronos, incluso HBO lo hace y por el momento ha dado con Westworld, una debilidad para un servidor que sin embargo no ha logrado estar a la altura del fenómeno que pretende emular. Sin duda alguna la montaña es alta. Juego de Tronos es un titán, un fenómeno de la cultura pop que dejará un tremendo vacío y cualquiera que se equipare saldrá perdiendo. Pueden pasar muchos años antes de que aparezca un prodigio similar. HBO tiene atado a R.R Martin y toda su obra de Canción de Hielo y Fuego, así que parte con ventaja de cara a/los spin-off. Las comparaciones serán odiosas.

Algunos ya lamentamos la ausencia de Juego de Tronos antes de que se produzca. Pero será mejor disfrutar de lo que nos queda y ver después ver qué hacemos. Ese será el futuro problema, qué ver después de Juego de Tronos. Seguro que en HBO también se lo están preguntando. Naaaa na nana na nanaaaaa…

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Sobre el autor » Benzo

Empecé con una NES a finales de los 80 y todos los 90 los pasé junto a SNES, N64 y una PlayStation prestada. El nuevo siglo me trajo una PS2 y más adelante una Xbox. Jugador de PC desde hace años, seguidor de Blizzard, lector y seriéfilo.

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