"En nuestro país, ¿queremos permitir formas de comunicación entre personas que incluso en casos extremos, con una orden firmada por el Secretario del Estado, no podamos leer?", comentaba Cameron ayer durante un acto de campaña. "Mi respuesta a esa pregunta es 'No, no debemos'. El primer deber de cualquier gobierno es mantener nuestro país y a nuestros ciudadanos a salvo".
El primer ministro señala que el Gobierno británico nunca ha permitido ningún método de comunicación que no sea accesible bajo orden judicial, como es el caso del correo postal o las llamadas telefónicas. Por ello, Cameron considera que la mensajería online cifrada no debe ser una excepción, aunque dejando claro que solo se producirán intrusiones con una orden firmada.
"Los ataques de París demuestran la escala de la amenaza a la que nos enfrentamos y la necesidad de tener un poder robusto de inteligencia en todas nuestras agencias de seguridad con el fin de mantener a nuestros ciudadanos a salvo", sentenció Cameron.