Se define más estrictamente el concepto de copia privada, limitando su procedencia de una obra original y su uso al ámbito doméstico. Al mismo tiempo se mantienen los cánones sobre los soportes ópticos (CD/DVD), suponemos que con los mismos importes a pesar de que la inmensa mayoría de copias privadas actuales pasarían automáticamente a ser copias ilegales.
Se deja caer un posible canon a Internet: los agentes culturales tendrán derecho a recibir una remuneración equitativa y económica por la puesta a disposición de sus obras en soportes digitales (como Internet).
Se remunerará también a los autores por el uso o acceso a sus obras por discapacitados, bibliotecas y enseñanza.
Dicen que el que no llora no mama y los autores (más bien los auténticos cuatro gatos) lo han vuelto a conseguir, logrando en este caso el apoyo de todos los grupos políticos (en la noticia pueden leerse las congratulaciones de socialistas y populares). El texto seguirá debatiéndose la semana que viene.
Actualización: Se nos pasó comentar hace algunos días el estudio presentado por ASIMELEC y dirigido al Congreso, en el cual se justifica que los DVD vírgenes no deberían pagar canon debido a las protecciones anticopia que incluyen los DVD-Video.