Según fuentes del New York Times, Electronic Arts habría perseguido a Valve durante años aunque las negociaciones nunca habrían progresado lo suficiente. A pesar de eso y por mucho dinero que Electronic Arts pudiera poner sobre la mesa Gabe Newell, CEO de Valve no tenía nada claro vender su compañía ya que según el si esto sucediera, "Valve terminaría desintegrada".
Los 1.000$ millones de Valve parece que quemaban en las manos de Electronic Arts ya que en los últimos años ha gastado una cantidad similar en otros estudios, pagando 450$ millones por Playfish y 750$ millones por PopCap (que ha terminado cerrando estudios).