Siguiendo con la información publicada ayer por diferentes medios de comunicación hemos tenido acceso al auto de medidas cautelares contra la venta del PS Jailbreak (y dispositivos similares). Se trata de un auto de urgencia fechado a 13 de septiembre, solo tres días después de ser presentada una demanda judicial contra todos los distribuidores oficiales del dispositivo en España, y para cuya decisión la jueza que lo firma no ha escuchado a la parte demandada (solamente a Sony).
La magistrada llega a afirmar en el auto que el PS Jailbreak es un dispositivo que facilita la piratería de videojuegos de la consola PS3 y que la inminente llegada a nuestro país de la primera partida generaría unos daños y perjuicios irreparables, así como una afectación grave y desproporcionada de las actividades económicas de Sony, que da empleo a 167.000 personas en todo el mundo (comentario que no podía ser más inoportuno, pues con o sin jailbreak Sony se va a deshacer de la única fábrica que le quedaba en España).
El auto, que será recurrido en los próximos días, ordena concretamente las siguientes medidas cautelares: