Me he hecho de rogar a mi mismo a la hora de poner las primeras impresiones de este ¿juego?, ¿sueño?...
Lo tengo desde la mañana del sábado 2 de Agosto, esa misma noche no llegue a dormir más de dos horas seguidas por la fiebre de conseguirlo. Al día siguiente tenía que ir a trabajar y a una boda, ¡por lo que imaginaros el careto que tuve todo el día!
Como muchos de los que lo han probado, creo que el juego es de los que menos dudas ofrecen en un principio sobre su jugabilidad. Yo soy de los que siempre ven con buenos ojos las nuevas versiones, pero hay que decir que esta convence desde un principio por la tremenda calidad que atesora en todos los aspectos.
Al comenzar el juego nos aparece el nuevo logo de Konami, supongo que habrá que acostumbrarse, pero yo me quedo con el anterior, tantos años viéndolo le hacen a uno cogerle cariño, y era verlo y aun siendo otro juego, esperar a que saliera el Winning por ahí. La presentación es de las más flojas, sin duda es una clara referencia a lo que te vas a encontrar en el juego. Parece que le dan mucha importancia al público, a las aficiones, y eso se nota luego en el juego, por que el sonido ambiente del estadio es realmente espectacular, aun no se si tiene o no cánticos reales, pero detalles como el que por la megafonía del estadio se intuya los cambios que acabas de realizar es todo un detallazo.
Los menús como siempre son toda una aventura, en su perfecto japonés, aunque esta vez Konami parece que nos estuviera “puteando” al haber traducido solo el menú principal, jejeje. Las opciones por las que me he movido casi siempre como si fuera un perfecto castellano, ahora son menos previsibles, por la cantidad de novedades que incluyen: Weshop, modo edición más completo, la Master Ligue se ve muy difícil de jugar así… nos toca esperar una traducción como Dios manda.
Konami no nos ha mentido, y si que ha implementado un motor grafico que se nota, y mucho. Los jugadores están tremendamente bien representados, las caras asustan de los reales que parecen. Pero no solo las caras, sino los físicos y los movimientos (de estos dos apartados, tendría que aprender cierta saga de ¿“fútbol”? digital muy conocida, sobre la que nunca he visto mayor capacidad grafica, la verdad). Comentarios de mis amigos: “no, no es que se parezca a Verón… ¡ES VERON!... ¡¡PERO VERON, QUE HACES DENTRO DEL JUEGO!!” (xDDD) Ver como se mueven Aimar, Saviola, Kluivert… asusta de lo real que puede llegar a ser y lo que significará esta saga en el futuro y en una consola de mayor capacidad… “conversión del fútbol real: ¡píxel perfect!” xDDD. Los nuevos detalles gráficos, como los vendajes en las lesiones, las camillas retirando a un jugador, los estadios aun con más calidad… nos dan un envoltorio visual que te introduce aun más en la simulación del deporte rey.
Haciendo referencia a su jugabilidad, esta no es una review porque a estas alturas y tal y como está el idioma del juego es difícil disfrutar de todo lo que leva dentro, tengo que, simplemente, rendirme a los pies de Konami. No es una rendición provocada por un fanatismo, que lo tengo y mucho, sino desde la imparcialidad que trato de tener ante los GRANDES juegos. El nuevo motor grafico parece que también trae nuevas animaciones que suponen mayor realismo en todas las acciones. Konami ha comenzado el camino hacia los nuevos regates (marsellesa, sombreros, nuevos quiebros y pisadas del balón) hacia una jugabilidad más arriesgada, pero sin caer en el error de otros juegos, estableciendo un nivel entre la capacidad de regatear y perder el balón, apoyado en unas defensas con una IA que está realmente trabajada y que cortan balones como nunca (olvídate de pasar con el X sin ton ni son porque no olerás el esférico). Solo destaco un punto que veo flaco con respecto a la anterior entrega, los centros a puerta; ahora salen mucho más bombeados sin la fuerza ni el efecto necesario para llevar el peligro que había en el WE6FE. Espero cambiar alguna configuración para poder hacer los centros más peligrosos. Han cambiado por el contrario la forma del remate de cabeza, siendo ahora más realista, solo hay que ver los escorzos que realizan los jugadores, es increíble como plasman el movimiento real…
Pero para mí hay dos detalles que sin duda suponen el mayor acierto dentro de este capitulo de la saga: los remates a puerta y las reacciones de los jugadores. Empezando por lo segundo, decir que se acabaron los jugadores estáticos ante un balón perdido, y unas defensas que realmente ayudan en la labor de robar el balón, que se anticipan y se cierran perfectamente. Ahora en el 90% de las acciones, nos encontramos en que podemos tener el control del jugador que ante un mal pase que va a coger la defensa, puede esta vez luchar en vez de quedar perdido y andando por el terreno. Así mismo reseñar que supone algo mucho más difícil el despejar un balón dentro del área y también el que cuando este cae, no siempre hay dos jugadores para lucharlo, algo que me desesperaba (los delanteros siempre llegaban a los despejes de su defensa, favoreciendo un juego al patadón), sino que el despejar sin pensarlo, puede suponer, y lo debería de hacer en la mayoría de los casos, el arriesgarse a perder el balón.
En cuanto al siguiente punto, decir que el remate a puerta está completamente cambiado. Ahora el chute es muco más potente y controlado, por lo que los goles lejanos son más posibles y más realistas. Pero sin duda lo que más me gusta es el remate de volea… ¡ES INCREIBLE! Ahora los jugadores empalman balones que bajan de las nubes, o que viene a media altura desde un pase, y logran unos chutes que hacen imposible la propia reacción de los porteros. Es algo nuevo en reilación a las anteriores entregas, donde las voleas eran más bajas y a vote pronto. Aquí puedes enviar un zambombazo a la escuadra y dejar al portero inmóvil. Aun un he llegado a lograr el efecto de la “folla seca”, pero seguro que se pueden alcanzar algunos goles de bellísima factura, se irán viendo subir a internet seguramente.
Concluyendo, porque para ser unas primeras impresiones ya me parecen bastante largas, decir que Konami ha vuelto a dar en el clavo, pero esta vez arriesgándose más que nunca, con un montón de novedades y con la inclusión de detalles que SIEMPRE les estábamos exigiendo: ¡por fin hay una repetición libre!, en cualquier momento la puedes activar, pero hazlo antes de que comience la siguiente jugada o perderás el ver la anterior… no todo iba a ser perfecto, se puede comprar una opción en la Weshop para cambiar jugadores entre clubs y por fin ¡actualizar las plantillas sin tantos problemas como antes! (aunque hay que ganar muchos puntos para lograrlo, pero si duda merece la pena). En lo que Konami nos ha dejado con la miel en los labios es en el tema online, solo para actualizar las plantillas, y a ver como va esta posibilidad cuando habiliten el servidor, se supone que con el juego “aun sin venderse en la calle”, no lo tendrán activado. Esperemos que en un siguiente WE 8 (no creo que la versión PAL incluya este modo) disfrutemos de lo que significará para muchos el fin de la vida social, tal y como la conocemos, jejeje. Muchos hablan de una versión Final Evolution online, pero hasta que no se sepa nada oficial o al menos extraoficial, solo son deseos de la gente, que en absoluto tienen porque cristalizar, como siempre prefiero no hacerme falsas ilusiones.
Me gustaría acabar dándole las gracias a Konami por otra versión mágica de esta pequeña joya que es siempre el Winning Eleven, por no defraudar, por darnos el fútbol más real en un simulador, por hacer los juegos (eso se nota) con el cariño de un aficionado y no con la especulación de un empresario, por lograr tenerme con 3 amigos jugando 9 horas y media seguidas hasta las 7:30 de la mañana...
Winning Eleven 7: “¿De qué planeta viniste, para dejar en el camino a tanto inglés*?”
* Substitúyase en la frase por cualquiera de los demás infructuosos intentos de simular el deporte rey