Moraydron escribió:Es que encima no paran de repetir lo mismo, sus mensajes se han convertido en baits de baja calidad.
Un saludo.
Llamarlo “estupideces” no borra los hechos. Van algunos, con fuentes.
Entra AI:
1) Peso económico y demografía en retroceso.
– La cuota de la UE en el PIB mundial cayó del ~29% en 1992 al ~17% en 2022. Es decir, el peso relativo de Europa se reduce desde hace décadas.
– El envejecimiento y la caída de la población en edad de trabajar son estructurales y merman crecimiento potencial.
2) Tecnología y nube: dependencia externa.
– En la nube europea, los tres de EE. UU. (AWS, Microsoft, Google) concentran ~70% de cuota; los proveedores europeos se estancan en ~15%. Eso es dependencia crítica en la infraestructura digital base.
– Europa tiene muy poca presencia entre los grandes líderes tecnológicos globales, y la brecha de productividad con EE. UU. se ha ampliado desde 2019.
3) Energía cara = industria menos competitiva.
– En 2023, los precios industriales de electricidad y gas en la UE fueron un 158% y 345% más altos que en EE. UU., respectivamente. Ventaja directa para el tejido productivo americano.
– La UE dependía fuertemente del gas ruso (más del 40% de las importaciones en 2021). Se ha reducido al ~11% en 2024, pero el ajuste dejó costes energéticos persistentemente altos.
4) Defensa: autonomía estratégica insuficiente.
– EE. UU. aportó el 66% del gasto militar total de la OTAN en 2024. Europa gasta más desde 2022, pero la asimetría sigue siendo enorme.
5) Materias primas críticas: cuello de botella.
– La UE depende al 100% de China para las tierras raras pesadas y el 95% de las importaciones de tierras raras provienen de China, Malasia y Rusia. Sin esos insumos no hay transición verde ni defensa moderna.
6) I+D e inversión en innovación por detrás.
– La intensidad de I+D de la UE ronda el 2,2% del PIB (2023), lejos del 3,5% de EE. UU. Draghi lo señala como problema central de competitividad.
España, además: productividad creciendo ~0,5% anual (versus 1,2% OCDE) y gasto en I+D cercano al 1,4% del PIB, por debajo de la media europea.
Que Europa haya dilapidado parte de su hegemonía reciente no es una opinión; es una serie de tendencias medibles (peso económico, productividad, energía, defensa, insumos críticos, tech). Si no se corrigen, el rol geopolítico europeo seguirá menguando.
¿Soluciones (de verdad “drásticas”, no postureo)?
– Energía competitiva: bajar costes finales (reforma fiscal y de peajes), acelerar refuerzo de red y almacenamiento y, donde tenga consenso, recuperar capacidad nuclear para base firme.
– Capital y escala: unión de mercados de capitales y financiación común para industrias estratégicas (chips, cloud, IA, biotech), como recomiendan Letta y Draghi.
– Defensa europea real: compras conjuntas, estandarización y stockpiles; llevar gasto al 2–3,5% con foco en capacidades, no sólo plantillas.
– Soberanía digital pragmática: usar la contratación pública para traccionar proveedores europeos y exigir garantías de jurisdicción/datos; no repetir errores de Gaia-X.
– Materias primas críticas: ejecutar el CRMA con minería, procesado y stockpiles en Europa y acuerdos con aliados confiables.
Hasta ahí la IA.
Puedes llamarlo como quieras, pero los datos y hechos ahí estan: sin un cambio de rumbo, el peso de Europa seguirá siendo una broma en la geopolítica del siglo XXI y por eso actúa como lo que es, un vasallo de poderes superiores.
Sin un cambio completo y drástico y reformas importantísimas estamos absolutamente perdidos.