Os comento mi odisea (pequeño ladrillo):
En el mes de septiembre más o menos fui al médico de cabecera para decirle que me dolía cuando lo hacía. Me miró y me dijo que, efectivamente tenía un problema. Tenía el frenillo demasiado corto y me estiraba mucho. Le dije que me quería operar y mandó la solicitud para que me viese el urólogo.
Al poco tiempo fui al urólogo, me miró y me dijo que si, que tenía que operarme, y yo le dije que ok.
Total, que me llamaron para la operación, me anestesiaron (3 pinchazos en el capullo) y me lo quitaron. Total, que cuando termina de operarme me suelta:
- Te he visto que tienes un anillo de piel muy estrecho, lo más seguro es que tengas fimosis y te tengamos que operar. Yo me quedé
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, otra vez a pasar por lo mismo.
Al mes tube que ir a la revisión y me miró lo de la fimosis el urólogo a ver si la tenía. Me dijo que sí y que si me quería operar y claro, le dije que sí.
Bueno, llegó el día de la operación. Yo ya sabía lo que me iban a hacer, puesto que leí bastante del tema antes. Me ponen la anestesia, un pinchazo en el capullo y otros dos en la base del pene.
Me dice el cirujano:
- Dime si te duele lo que te voy a hacer.
Yo:
- AAAAAAAAAAHHH, COOOOÑOOOOO!!!
Cirujano:
- Vaya, voy a ponerte más anestesia.
Zaca, otro pinchazo en la base.
Cirujano:
- A ver si te duele ahora.
Yo:
- AAAAAAAAAAAH, JODEEEEEEERRR!!!
Total, que despues de otros 2 AAAAAAH más, por fin consiguen que no sintiese nada.
Me terminan de dar los puntos, me la vendan y me llevan a una sala de observación para ver como evolucionaba.
Total, que al cabo de media hora se me pasa el efecto de la anestesia:
APOCALIPSIS!!!!Un dolor TERRIBLE se apodera de Carlitos. En serio, no había sentido un dolor tan fuerte en toda mi vida, yo llorando y todo. Me pusieron 2 bolsas de calmante en vena y no me hacían efecto, cada vez me dolía más. Hasta que, después de 1 hora de insufrible dolor, por fin se digna a aparecer el urólogo que me había operado a mirármelo. Me quita el vendaje con ninguna delicadeza, me lo mira y dice: está todo bien. Me la vuelven a vendar y, por suerte, se me calmó el dolor. Supongo que me lo dejarían muy apretado o algo.
Me voy a mi casa a las 6 de la tarde y, al cabo de 2 horas, me doy cuenta de que tengo todo el pantalón empapado de "algo". Me bajo el pantalón y miro que es sangre. Estaba sangrando mucho. Me voy para urgencias, me lo miran y me dicen que es normal, que estaba muy fresco y que no pasaba na. Me cambian el vendaje y ale, para casa.
Total, que me acuesto y, al levantarme por la mañana, de nuevo TODO empapado de sangre, pero una cantidad bestial. Digo yo: esto no es normal. Tiro de nuevo pa urgencias y estos me dicen que ya no es normal, que vaya al hospital y que me lo miren.
Tiro pal hospital, me quitan el vendaje, me lo miran y me dicen que se habían dejado mucho hueco entre un punto y otro y que por eso no dejaba de sangrar. Me tenían que dar otro punto.
Yo ya cagándome en todo lo cagable. Digo, bueno, a ver qué se le va a hacer.
Total, que me suben a una camilla y me dice el cirujano:
- Mira, la anestesia es pinchar y pinchar, y darte el punto es lo mismo, así que es mejor que ni te ponga anestesia.
Y digo yo, pues vale, si es mejor...
Es la peor sensación y el dolor más doloroso, que te den un punto ahí a sangre fría, sin anestesia ni ná. Yo retorciéndome de dolor y, de nuevo, llorando. Total, que me dio solo medio punto y me dijo que necesitaba 2 puntos en vez de uno, que me iba a poner anestesia mejor.
Yo pensando: cabrón, eso tenías que haber hecho desde un principio.
Después de todo, por fin no sangro más. Lo único que tengo es un picor de la hostia por haberme afeitado y que me duelen los huevos de no descargar. Por lo demás, todo perfecto.
Como conclusión: No se puede asegurar que no duele nada tan a la ligera, puesto que se te pueden presentar mil y un problemas que harán que te duela de la hostia. Además, el umbral del dolor es distinto en cada persona.
Salu2 y perdón por el ladrillo!!!