paco_man escribió:fusco escribió:
Junts ha compartido gobierno con un partido de izquierdas como ERC, ya simplemente por ésto se hace cae tal asociación. Y ni de coña Junts se acerca al ultraliberalismo que gasta el PP en sus filas e ideario, con populistas como Ayuso a la cabeza. Asúmelo cuanto antes, la derecha españolista no tiene nada que ver con la tradición democrática y republicana de PNV y Junts, ésta es heredera directa del franquismo (fundada por el exministro de la dictadura, Fraga), con todo lo que eso supone.
fusco a veces pones cosas que ni tú mismo te las crees. Y si cuela, cuela.
La de veces que han pactado PP y PSOE. Y PP con Junts (o más bien con CIU). Parece que naciste ayer y no has vivido todas estas cosas. O mejor, parece que quieres olvidarlas (o tomar por tontos a los demás). Ojo que a mí me da igual, pero me hace gracia.
Ni Junts es un partido progre ni PP es un partido de derechas.
Ni PSOE es un partido de izquierdas, al menos actualmente.
Nada de éso, a ver si vas a ser tú quién la quiere colar, a ver.... ¿Cómo vas a comparar los pactos institucionales que PP y el PSOE mantienen puntualmente (como principales promotores del la C78), con un acuerdo de gobierno -sostenido y compartido-, como han tenido ERC y Junts hasta la llegada Salvador Illa?
Junts es un partido liberal y de derechas, pero sí, podríamos decir que tiene una actitud progresista en comparación con la derecha española por antonomasia, el PP, que históricamente se ha opuesto por sistema a cuantos derechos civiles se han puesto sobre la mesa desde el inicio de la democracia, desde el divorcio, pasando por el aborto o el matrimonio homosexual, pero hasta el punto de sacar a la gente a la calle de la mano de los obispos. Y si analizamos su liberalismo económico, las diferencias son notorias, pues el PP (desde la llegada de Aznar en el 96), ha ido escalando en una deriva neoliberal, al punto de que todo lo que sea degradar la asistencia social es para ellos algo deseable para su modelo, básicamente centrado en el negocio sin límites ni moral, y con su vista fijada en sus principales referentes, EEUU y la Gran Bretaña de Thatcher.