Dos oficiales de la policía de Nueva York están siendo
investigados por aceptar pagos de la industria discográfica norteamericana. Según parece la RIAA proporcionaba pistas a los agentes sobre actividades de piratería y los incentivaba económicamente cuando se producían detenciones. A pesar de que uno de los policías ha sido ya reprendido la RIAA ha negado los hechos, afirmando que únicamente proporcionan información y apoyo logístico.