Hay que decirlo...
El niño era gilipollas, coño. Yo con diez años me tiraba terrones de tierra, trozos de arcilla blanda, jugabamos a pegarnos con palos y demas, pero joder, ¿a quien cojones se le ocurre ahorcarse? ¿Es que nunca ha leido un libro o visto una pelicula en la que alguien muera con la soga al cuello? Joder que poco sentido comun veo en el mundo...
Saludos!