Alberich escribió:Pero da bastante asco dar comida y encontrartela tirada, o que se quejen de que la ropa que les ofreces es vieja o no está a la moda. Esto viene a cuento de una anécdota que me contó mi madre: Fueron unas gitanas al ropero parroquial a por ropa, y la rechazaron porque era ropa "como muy de mayor". Pa flipá.
Eso también lo hacen con el dinero. Recuerdo ya hace no sé cuántos años que un señor que salía de misa le dió una moneda de 25ptas a uno que pedía en la entrada. Mientras el hombre se alejaba, el que pedía le gritaba insultándole, diciendo que si se creía que con eso podía vivir, y acabando por lanzar la moneda contra el suelo pasando de ella. Mendigos señoritos.