Me parece que algunos sois un poco bordes joer… puede hacer lo que quiera, postear y sudar de los consejos o postear y hacer caso a la mayoría de la gente, a la cual, recordemos, no conoce.
En cuanto al asunto, yo soy más de los que piensa que hagas lo que te pida el cuerpo. Mira, estas cosas en el fondo son más sencillas de lo que parecen. Máxime si dejas a un lado la supuesta dignidad, honor o como lo quieras llamar. Me explico:
Si ella de verdad quiere volver contigo, si sigue sintiendo algo por ti, da igual lo que hagas, porque al final, acabará volviendo. Conclusión: actúa. Más que nada porque no tienes nada que perder. Esto es, si la llamas, no la agobiarás (si he entendido bien tu preocupación al llamarla). Si no la llamas, desde luego no la agobiarás pero… ¿contribuirás a que te olvide? Quién sabe.
Por otro lado, si ella ya tiene claro que no quiere volver contigo, que hagas lo que hagas no te va a… ¿perdonar? pues entonces también dará igual lo que hagas, porque cualquier decisión estará ya tomada.
El problema vendría si ella tiene dudas, si no sabe lo que quiere. En estas situaciones, quizás, y repito, sólo quizás, es posible que sea importante lo que tú hagas. ¿consideras que es importante volver con ella, independientemente de que ella tenga dudas actualmente y que, por ende, las pueda volver a tener en un futuro? ¿Qué no te importa que ella no tenga claro si estar contigo? Entonces, haz todo lo posible para no cagarla. ¿El camino correcto? Sólo ella lo sabe, pues sólo ella sabrá cómo se siente, bueno y algunas personas allegadas con quienes sea sincera claro está. Ahora eres tú el que igual tienes que aclararte con respecto a si te conviene estar con alguien que actualmente tenga dudas en volver contigo.
No estoy diciendo que si tiene dudas y decide volver, por el motivo que sea, le vayan a surgir dudas en algún futuro con casi toda seguridad. Pero… ¿cómo sabes si realmente, en cada momento de la relación, ella no está teniendo dudas en estar contigo? Esto es, a mi modo de ver, como cuando inicias una relación con alguien que no tiene claro si estar contigo o no y sale contigo “para ver” si se engancha, enamora o llamémoslo X. Casi siempre, acaba fallando la cosa.
La dificultad de esto, creo yo, es que no tienes modo de saber qué está pasando por su mente. Porque también puede ser que te esté poniendo a prueba, que te lo esté haciendo pasar mal para ver si eres capaz de sacrificarte lo suficiente para estar con ella (aunque para esto, creo yo, ella debería ser una persona muy fuerte). Pero también pueden resultar las dos opciones, que no quiera absolutamente nada contigo, o que tenga dudas. Eso, por desgracia, no tendrás forma de saberlo.
Por eso, mi conclusión con estas cosas casi siempre es hacer lo que me pida el cuerpo e intentar no complicarme la vida. Si la cosa tiene que acabar bien, acabará bien, pero si no, acabará en que cada uno sigue su camino.
Ésta, por supuesto, es mi teoría, muy sencilla en la cabeza pero que, cuando te importa alguien o comienza a importarte, es prácticamente imposible poner en práctica.
Y no me enrollo más que creo que me he liado mogollón. Igual te he hecho más lío… pero es que estas cosas son eso, un lío y no hay verdades universales.