Muy buenas a todos. Antes de nada, gracias por entrar aquí y participar en mi hilo.
Al fin me he decidido a compartir con vosotros mi colección. Debo advertir de que no se trata de una colección demasiado amplia en cuanto al número de títulos, más aún viendo otras colecciones de por aquí que son realmente asombrosas, entre otras cosas porque apenas llevo alrededor dos años coleccionando “en serio”, pero estoy ciertamente satisfecho con ella, sobretodo porque he alcanzado el objetivo que me propuse cuando la comencé, que era conseguir todos los sistemas que he tenido o he jugado a lo largo de mi vida así como la mayoría de los juegos que tuve o jugué en cada uno de ellos, o al menos los que recuerdo. A partir de ahora, sin prisa pero sin pausa, continuaré ampliándola con nuevos títulos tratando de conseguir una selección de los mejores (para mí) de cada sistema, pero sin objetivos concretos sino únicamente disfrutando de la experiencia de búsqueda y compra de los juegos, uno de los mayores alicientes de este grandioso hobby.
Desde luego, la colección que vais a ver representa mi estilo de coleccionismo y gran parte de mi personalidad, ya que me considero una persona bastante perfeccionista, detallista y cuidadosa, por lo que vais a ver como uno de los principales rasgos de mi colección es la importancia que le doy al almacenamiento de cada artículo, para mi es tan importante el juego o consola en sí mismo como la forma de exponerlo, pretendo darle a cada cosa la mayor importancia posible, mostrarlo de la mejor de las manera para permitirme disfrutarlo en cada momento y, por ende, disfrutar la colección completa, sentirme rodeado por ella, por cada artículo, poder admirarlo en la estantería o vitrina, rememorar los viejos tiempos que me evoque, apreciar todos y cada uno de sus detalles, de la belleza de las distribuciones de antaño… No es solo almacenar juegos, es admirarlos y disfrutar de lo conseguido más que obsesionarse por lo siguiente que vendrá. Esa es mi filosofía para coleccionar. Sin duda uno de mis límites es el espacio disponible, cuando no me sea posible almacenar un nuevo juego como se merece es que ya no puede formar parte de la colección, al menos mientras no disponga de más sitio.
MI ESTILO DE COLECCIONISMO
Mi estilo, o mejor dicho, mis reglas para coleccionar son claras y trato de no romperlas en “casi” ninguna circunstancia. Lo más importante es que todos los artículos deben estar en un estado de conservación de muy bueno en adelante, y completos. Para mi coleccionar es mantener vivo, como parado en el tiempo, un artículo antiguo que me trae unos grandes sentimientos de nostalgia, por lo tanto es muy importante que se encuentre en perfecto estado para poder ser admirado en cualquier momento de la forma más cercana a como lo haría entonces en la época en que fue distribuido. Mi segunda regla es que siempre intento conseguir la versión distribuida en España, cuando la haya, y de poder ser la primera edición, aunque en ciertos casos he podido hacer alguna excepción a este aspecto, pero se trata de eso mismo, excepciones. Por último, como ya he comentado, empecé a coleccionar para recopilar todos aquellos sistemas que tuve yo personalmente en cada momento de mi vida y todos los juegos que recuerdo tener, alquilar, jugar en definitiva… aunque si dispongo en mi colección de algún sistema que nunca tuve o que jugué únicamente en casa de amigos o familiares.
MI PEQUEÑA HISTORIA
A continuación, voy a mostraros mi colección al mismo tiempo que os cuento mi historia con los videojuegos, mis recuerdos y todos esos sentimientos que quiero volver a recordar coleccionando. Lo haré lo más resumido posible, pero os pido de antemano que me perdonéis porque será un tocho importante. Sin duda, los videojuegos forman parte de mi vida, parte de mí, soy como soy en cierta parte debido a los videojuegos, recuerdo estar rodeado por ellos casi desde que tengo uso de razón. De hecho, podría hacer un esquema cronológico de mi vida solo en base a la consola que tenia en ese momento, a los títulos que jugaba entonces, a las tardes con los amigos jugando a este o aquel videojuego…

Todo comenzó con la Mega Drive II que me compraron mis padres en una pequeña tienda de barrio que desapareció ya hace años. Recuerdo ver maravillado aquellas imágenes coloridas que aparecían en el enorme televisor del salón de casa y que podía manejar con aquel precioso mando negro, creo que fue un flechazo y aquello hizo que hoy en día me apasione todo lo relacionado con el mundo audiovisual y la tecnología. Tuve el pack con el Mega Games I y el Sonic 1, y recuerdo la enorme diversión que me proporcionó durante varios años, menudos vicios al Super Hang-On, a los Sonic, al Italia 90, al Columns, al Shinobi, al Hook, al Rey León, al Streets of Rage, al Street Fighter, al FIFA 97… aunque tuve pocos juegos en propiedad, casi todo lo que jugué fue alquilado en el videoclub del barrio. Era una experiencia bajar el viernes a rebuscar entre sus atestadas estanterías por aquella portada que me llamara la atención para poder jugar todo el fin de semana. Por suerte, casi todo lo que recuerdo jugar lo he conseguido y ahora quiero ampliar más el catalogo con juegos que he descubierto después.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS

Nunca la tuve, ni tengo apenas ningún recuerdo con ella más allá de jugar contadas ocasiones en casa de mis primos, es por esto que este sistema no me trae ningún recuerdo ni nostalgia y por ello inicialmente no iba a formar parte de mi colección, no obstante, me atrae mucho su catálogo y recientemente he querido comenzar una pequeña colección del sistema, ya que los precios no están como para mucho más.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS

Fue mi segunda consola, después de la Mega Drive II, y aun recuerdo el día que fui a comprarla al videoclub del barrio de la mano de mi abuelo. Para mi es una consola muy especial, principalmente porque aquellos años son de los que recuerdo con más cariño y más felices de mi juventud, por todo ello, diría que es sin duda uno de mis sistemas favoritos, además de que en Nintendo 64 he jugado a varios de mis juegos preferidos de siempre. Recuerdo los vicios sin descanso a Goldeneye, los piques con los amigos al ISS, las horas de diversión jugando al Mario 64 o al banjo Kazooie o las emociones al jugar al Ocarina of Time, el que para mi sigue siendo aún a día de hoy mi juego favorito.
LA CONSOLA Y ACCESORIOS
LOS JUEGOS

Nunca la tuve, aunque ésta sí la jugué mucho porque varios de mis amigos y mis primos la tenían y a menudo quedábamos para pasar largas tardes de vicio. Creo además que este sistema tenía que tenerlo sí o sí porque no solo marcó un punto de inflexión en la historia de los videojuegos, sino que tiene un catalogo espectacular con varios de esos juegos que siempre se recordarán, e incluso el nacimiento de sagas míticas.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS

Mi tercera consola cronológicamente fue la Sega Dreamcast. Le tengo mucho cariño también, casi como a la 64, por los recuerdos tan magníficos que me trae aquella época. Es una consola que creo se adelantó a su época, era espectacular y de haber durado más en el mercado habría sido una referencia en la historia de los videojuegos, pero lamentablemente Sega estaba moribunda y la PS2 le dio la puntilla. Recuerdo esperar con impaciencia su lanzamiento, deseando tenerla, tras ver las imágenes de sus primeros juegos, miraba mi Nintendo 64 y la Dreamcast me parecía algo de otro nivel. La compré el día de salida, junto con mi mejor amigo y mi primo nada más salir de clase en el Blockbuster de al lado de casa, es sin duda otro de mis sistemas favoritos.
LA CONSOLA Y ACCESORIOS
LOS JUEGOS

Con la salida de PS2, su unidad de DVD y aquellos gráficos tan majestuosos empecé a mirar envidioso a aquellos amigos y compañeros de clase que disfrutaban de ella mientras yo seguía con mi Dreamcast. Después de no haber tenido la primera PlayStation quería disfrutar de todos aquellos grandes juegos como Metal Gear, Gran Turismo, Pro Evolution… etc que no habría podido probar en casa en la generación pasada. Por eso, cuando Dreamcast empezó a flaquear terminé haciéndome con una PS2 en el pack con el GT3 en aquella preciosa caja roja. Sin embargo, lo que no recuerdo es dónde la compré, es la única consola de la que no tengo el recuerdo del día de su compra. Desde luego fue todo un acierto, ya que la época de PS2 la recuerdo como en la que más tiempo dediqué a los videojuegos, fue una locura la cantidad de grandes títulos que pude disfrutar, nunca olvidaré la diversión que me produjo jugar el Metal Gear 2 o al 3, al Gran Turismo 3, la infinidad de horas jugando a dobles a los distintos PES, y así con un sinfín de títulos mas de multitud de géneros.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS

Otra consola que nunca tuve y ésta además nunca la jugué, no conocía a nadie en la época que la tuviera, por lo que no tengo prácticamente ningún recuerdo de ella. Únicamente recuerdo cuando la vi por primera vez in situ, fue en un Alcampo, dentro de una vitrina, y me pareció la consola más bonita que jamás había visto, quise tenerla para volver a disfrutar de aquellos títulos que tanto disfruté en Nintendo 64 pero actualizados, como Super Mario o Zelda, o a aquel remake del Resident Evil que parecía casi real y que deseaba poder jugar después de verlo en la mítica Hobby Consolas, pero nunca pude. Decidí incluirla en la colección porque me parece una consola fantástica y preciosa además de para poder hacer realidad al final aquel deseo de juventud que nunca pude cumplir en la época.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS

Fue mi quinta consola y la recuerdo con especial cariño por ser la primera que compré con mi propio dinero, con mi primer sueldo. Lo hice meses después de su lanzamiento, aquellos 600€ no era fácil reunirlos y el verano de 2007, con mi primer trabajo, dediqué casi la totalidad del sueldo a hacerme con aquella bestia tecnológica que era la PS3. Todavía tenía la PS2 pero en aquel tiempo ya apenas jugaba, el trabajo y los estudios me quitaban mucho tiempo y ya en aquella época mis preferencias habían cambiado y había empezado a abandonar un poco el mundo de los videojuegos, no obstante, aquella consola en alta definición que prometía juegos fotorealistas la tenia que tener. Compré la versión FAT de 60Gb que incluía el Motorstorm y Resistance: Fall of men, y recuerdo que me pareció un salto cualitativo bestial respecto a mi PS2. Sin embargo, la PS3 la usé poco, tuve algunos juegos sí, pero escasos, y ahi empezó un período en el que me desligué bastante de los videojuegos y que ha durado hasta prácticamente unos 5 años, cuando retomé nuevamente esa sensación de volver a disfrutar de los juegos como de pequeño con la PS4.
LA CONSOLA
LOS JUEGOS
GENERACIÓN ACTUAL

Como digo, a partir de PS3 abandoné casi al completo el mundo de los videojuegos. Mis preferencias habían cambiado, tenía responsabilidades y durante varios años apenas jugué. Sin embargo, con el lanzamiento de PS4 quise retomar aquellas sensaciones y compré la consola el día de salida. No obstante, aunque inicialmente la tomé con ganas, poco a poco nuevamente fui dejando de utilizarla hasta que apenas la encendía algún día entre tantos. Terminé por venderla cuando salió la versión Pro. Sin embargo, hace unos 2 años decidí volver a retomar mi amor por este mundillo, volver a disfrutar de los videojuegos y fue cuando quise empezar a coleccionar para volver a tener todo aquello que recordaba tener durante toda mi vida, por pura nostalgia, y que ha dado como resultado la colección que os muestro aquí. Pero sin duda, fue un día que pude ver por primera vez en persona la Nintendo Switch que algo en mi cabeza cambió. Esa colorida consola de Nintendo me evocó aquellos años en los que disfrutaba de mi Nintendo 64, no me preguntéis por qué, pero me trajo muchos recuerdos, me encanta, y fue ahí cuando decidí hacerme con ella y posteriormente con la PS4 Pro y la Xbox One X para disfrutar de los juegos en 4K aprovechando mi nuevo televisor. Como dije al inicio, también soy un apasionado de la tecnología, y en esta ocasión me he reenganchado a la generación actual a raíz de poder disfrutar de la nuevas máquinas 4K, y ahora puedo decir que he vuelto a enamorarme de los videojuegos, aunque no con todo el tiempo que quisiera para dedicarles, pero estoy francamente contento de volver a sentir todas las sensaciones que puede hacer sentir un videojuego, al fin y al cabo, son parte de mi vida, he crecido con ellos, me han hecho como soy.
MI SETUP ACTUAL
Para jugar a las consolas actuales, lo tengo todo conectado a un OLED LG 55 pulgadas 4K, de forma que quede todo lo mejor integrado posible y, aunque esta dispuesto para jugar a cualquiera de las consolas, la idea era que pareciera que estuvieran igualmente expuestas como todos los sistemas retro, aunque estos protegidos por vitrinas.



LA EXPOSICIÓN DE LA COLECCIÓN
Toda la colección la tengo expuesta en dos lugares diferentes de la casa, por un lado, en la habitación donde está la TV para jugar y el Ordenador para emular todos los sistemas retro, donde dispongo de una serie de estanterías y vitrinas para presentar de la mejor manera posible mi colección de sistemas y parte de los juegos, concretamente todo lo actual junto con Super Nintendo, Nintendo 64 y Game Cube.
Primero, unas vistas más o menos generales del cuarto de juego y la exposición de los sistemas de mi colección.

Aquí la zona dedicada a Super Nintendo y Nintendo 64. Todavía tengo cierto espacio para expandirme y meter nuevos juegos, ya que por el momento he conseguido pocos títulos de Super pero en el futuro espero incorporar alguno más. Al disponer de puertas de cristal, aunque no cierran herméticamente, me asegura reducir la entrada de polvo al interior y proteger los juegos además de darles un aspecto más atractivo y dotarles de la importancia que quería al estar expuestos en ella. Me permite además colocar sobre la estantería las cajas de los respectivos sistemas, N64 y SNES.





Por otro lado, la zona de la estantería principal donde se exponen todas las consolas de mi colección. Ciertamente le doy mucha importancia al hardware, siempre que he comenzado con un sistema he querido hacerme primero con la consola, y el requisito básico es que fuera la edición puesta a la venta en España y que estuviera como nueva. Debo reconocer que he tenido suerte de encontrar la mayoría de las consolas de mi colección nuevas a estrenar.








En la vitrina inferior, donde sólo esta la Super Nintendo, como sobraba espacio para algún sistema futuro que incorpore a la colección, me ha parecido interesante hacer una exposición de una pequeña selección de juegos representativos de cada uno de los sistemas, bien porque me marcaron de uno u otro modo en la época o porque me parecen muy representativos de cada uno de ellos.



El Super Metroid nunca lo jugué porque como he dicho no tuve la SNES, pero me parece uno de los juegos más importantes de su catálogo además de que me parece que tiene un arte espectacular y queda genial junto a la consola. Junto a él, el Ocarina of Time nuevo a estrenar, una de las joyitas de mi colección, como representación de mi querida N64, diría que es mi juego favorito de siempre y me trae una nostalgia brutal. El Sonic 3 me parecía buen representante de Mega Drive, el Metal Gear lo propio de PS2 aparte de que recuerdo viciarme a él en la época de forma bestial, y de PlayStation he seleccionado el RE1 por ser el primero de una de las sagas más importantes de la historia de los videojuegos. El Super Side Kicks 2 lo he incluido aunque no colecciono Neo Geo debido a que me trae grandes recuerdos jugando a la recreativa de crío, por lo que es un juego muy importante para mí.

Bajo la vitrina, la colección de juegos de Xbox One, con unos cuantos títulos que ciertamente me parecen bastante interesantes.

En la parte opuesta a la vitrina dedicada a Nintendo, la zona de TV y consolas actuales, sobre la cual hay una pequeña estantería con los juegos de PS4 y espacio para ampliar.

Sobre esta estantería una vitrina dedicada a accesorios de Dreamcast y he incluido una pequeña selección de juegos representativos del sistema, que es uno de mis preferidos para coleccionar.


Por otro lado, el resto de juegos clásicos, los pertenecientes a las colecciones de Mega Drive, Dreamcast, PS y PS2 están guardados en el salón, en el interior de un mueble tipo vitrina con puertas ciegas que los protegen del polvo.


El espacio cada vez es más limitado, por lo que tengo que escoger cuidadosamente cada nuevo ítem de la colección, pero aún tengo una ligera capacidad de ampliación, y cuando se llene habrá que seguir tirando de imaginación y creatividad para seguir aprovechando hasta el más mínimo centímetro cuadrado disponible.
Y esto es todo. Como os dije al principio, no es una colección demasiado grande, pero desde luego tiene todo el cariño que soy capaz de ponerle para conservar todos estos pedacitos de historia, de mi historia, y espero que nunca deje de seguir manteniendo ese interés por seguir ampliándola, descubrir nuevas cosas y continuar recordando aquellos maravillosos años que aunque no volverán, sólo con mirar alguna de las cajas de estos juegos me transporto inevitablemente a aquel instante, esa es la magia de coleccionar videojuegos retro, es como tener una maquina del tiempo de emociones y recuerdos, y por eso me gusta tanto. Espero que a vosotros también os haya gustado mi humilde colección, que he tratado de mostraros de la mejor manera posible. Espero ir actualizando poco a poco e incorporando las fotos de cada nuevo juego. Si habéis llegado hasta aquí, ¡¡¡muchas gracias!!!