[]_MoU_[] escribió:OJO, TOCHACO (de mi propio blog):
LA MECÁNICA DE THE MATRIX
Pues no. No va de cine. Sino de baloncesto. Y es que ayer, ha  ganado Dallas Mavericks su primer título NBA, contra los Miami Heat del  Big Three (tres estrellas juntas: Bosh, Lebron James y Dwyane Wade),  ganando el sexto partido para conseguir así las 4 victorias necesarias  para alzarse con el título, en lo que ha sido una de las eliminatorias  mas igualadas y emocionantes que he visto en mi vida, y ya van unas  cuantas. Si no te gusta el baloncesto, sal de aquí corriendo, pues va  para tocho, probablemente con algún que otro tecnicismo.
La serie ha sido la lucha entre el BALONCESTO entendido con  mayúsculas, el “old school”, de tipos que no son ni los mas fuertes, ni  los mas rapidos, contra el all-star-system: reunir a 3 estrellas  intentando que te den el título sin nada mas. Sin sistemas, sin jugar en  equipo, sin recursos, sin plantilla, sin entrenador. Ver a Barea, Kidd o  Nowitzky, luchando contra los hipermusculados y saltarines Wade o  Lebron ha sido parecido a lo que tiene que sentir un niño de 12 años al  jugar contra un adulto. Con la diferencia de que en su lado estaba el  cerebro. El saber jugar, la clase, los recursos, y sobretodo el EQUIPO.
Y es que los Mavs son un equipo. Sino surge uno, surge el otro, pero  en todo momento han ido apareciendo alternativas. En la primera parte,  su líder, su referencia, su gran campeón, Dirk Nowitzki ha estado  nefasto. 1 de 12 en tiros. Tiros relativamente sencillos, pero nada, no  entraban. Además, el pivot titular se cargó rápido de faltas y solo  anoto 5 puntos en todo el partido. Sin embargo, entre Jason Terry  (esperable) y sorpresas tipo Barea (un tipo que ni siquiera fue  drafteado) [15 puntos], Stevenson [9 puntos en 12 min, 3 de 5 en t3] y  demás llegaron al descanso 2 arriba.
Y ahí yo dije que Dallas ganaría. Seguro. ¿Por qué?. Porque el alemán  tenía que aparecer. Un jugador de tantísima clase, que ha promediado 26  puntos y 10 rebotes en estas series no podía repetir 2 cuartos tan  nefastos. Y si con Dirk fallon iban 2 puntos arriba, cuando anotase,  iban a ganar. Y así fue. En la segunda parte se cascó un mas que  meritorio 8 de 15, dobles marcajes incluídos, y 8 de los últimos 10  puntos de Dallas. Nunca he visto un tiro tan imparable. Quizá el  sky-hoop de Abdul-Jabbar, pero nada mas. Un tipo de 2.13 que saca el  balon de encima de su cabeza en un salto magistral a una pierna y hacia  atrás es imparable. Sencilla y llanamente no hay jugador de este mundo  que llegue a taponar eso. Es imposible. No obstante no creo que os  descubra nada de este super clase, raza blanca, tirador. Basta decir que  en el partido la NBA no ha parado de compararle mediante videos con el  que han denominado el tercer mejor jugador de la historia: Larry Bird
Me alegro muchísimo de la victoria de los Mavs. Primero por los  rivales: Los Beach Boys, los Heat del autoproclamado Rey Lebron James.  Tío mas creído no lo he visto en mi vida. Y me ha encantado ver el  ridículo que ha hecho en las finales. Amigo 
Pippen, la diferencia entre un gran jugador y Michael Jordan se ve en las finales. 
Estas equivocado.  Y segundo y mas importante, por los veteranos de calidad hasta hoy sin  anillo que forman la plantilla de Dallas. Auténticos ídolos del  baloncesto como Jason Kidd, 38 añitos y el tercer mejor base que yo he  visto jugar, por detras de Magic y Stockton, y para mi, por encima del 2  veces MVP Steve Nash; Shawn Marion, apodado The Matrix (al cual va  dedicado el título, quien no lo comprenda que vea 
éste video)  y que es el tipo de jugador que te da victorias, nunca egoísta, capaz  de aportar puntos, rebotes, asistencias, defensa. Fundamental. Jason  “Jet” Terry, pura clase, anotador letal. Peja Stojakovic, otro auténtico  ídolo, aunque ya mayor y lento ayudó muchísimo en playoffs, con 10  puntos de promedio en la primera ronda y 13 en semifinales, asesino  silencioso. Pocos equipos mejores para ver que sus Sacramento Kings,  baloncesto americano en estado puro. Y es que haces la media de edad y  de los jugadores importantes de Dallas y da miedo, Nowitzky 33, Kidd 38,  Marion 33, Stojakovic 34, Terry 34, Chandler 30, Stevenson 30. El único  joven de los que mas juegan es Barea (26)!!
Pero da igual, no tendrán físico, pero se han cascado un 50% de t2 y  un 42% de t3. Así es muy dificil perder. Miami ha hecho en éste partido  un 20 de 33 en tiros libres. Un 60 y pico %. Vergonzoso. Dirk Nowitzky  se ha cascado en toda la serie un 43 de 44!!!!. ¡¡Jugón!!. Y luego si  miras los porcentajes de triples en Miami dan asco, sus dos  superestrellas apenas llegan al 30%, 14 de 42. Y el resto del equipo  parecido: 5 de 17 Bibby, 7 de 22 Miller… y se les supone especialistas.  El único que se salva es Chalmers. Sin embargo en Dallas Dirk tiene un  50%, Jason Kidd un 40%, Stevenson un 55% etc etc.
Aún así la serie ha estado muy igualada, y se agradece, pues la  emoción siempre estuvo a flor de piel. En el primer partido ganó Miami  de 8, el segundo para Dallas 3 arriba. De nuevo otro para Miami, 2  arriba, y vuelve a alternar ganando Dallas de 3 ahora. Impresionante. A  partir de ahí, dos victorias trabajadísimas de Dallas, por debajo de los  10 puntos, y anillo para (por fin) su dueño, Mark Cuban. Pobrecillo, se  lo ha merecido, anda que no ha sufrido decepciones en los últimos años…  Le ha tenido que saber muy dulce la revancha que ha supuesto esta  serie, pues se repetían finalistas de 2006, donde Miami ganó en casa de  Dallas 4-2, igual que ahora pero a la inversa. Maravilloso. Aunque  claro, aquellos Heat contaban con el señor Shaquille O’Neal, palabras  mayores.
Otro punto claro a favor a sido el entranador. Rick Carlisle le ha  ganado la partida a Spoelstra en todo. En la manera de llevar los  partidos, cambiando las rotaciones, en los match-ups, y sobretodo, en el  concepto de equipo con el que Dallas ha llegado a la final. Otro rollo.  Miami era el sistema se la dejo a las estrellas, pongo a dos tiradores  bien abiertos, y suficiente, que para eso son 2 de los 5 mejores NBA y  otro all-star como Bosh. Le valió para plantarse en las finales NBA. No  está mal. Pero no ha sido suficiente. Y me alegro.
Ya para terminar, que son las 6.20 y tengo un sueño del carajo, decir que me sigue faltando el gran Andrés Montes. D.E.P.