DrSerpiente escribió:Fallo de los niños de no haberle dicho a la señora "si se acerca con nosotros le damos 20 euros"
En serio, los del centro comercial deberían hacérselo mirar. Que usen a un empleado, no a gente normal.
Imagínate que el que lleva el pantalón le acaban de echar del curro, o le ha puesto los cuernos su mujer/marido, o se le acaba de morir alguien....y vienen unos críos a tocar los huevos
@lobo_estepario2 .
O que sea un pedófilo, delincuente, secuestrador u otra cosa, que normalmente no será, pero si ocurre y pones a niños a estar siguiendo a adultos desconocidos puede ocurrir cualquier cosa.
En el caso descrito, no veo realmente una humillación, es decir, si hace nada de tiempo la señora montó un lío por un concurso y luego le toca y gana pues igual debería haber estado un poco avergonzada en pedir el premio, aunque la reacción de chillar de alegría es comprensible pero que sea el mismo lugar donde insultó y tocó ( que se entiende que lo demás entendieron que golpeó a un niño....) no se si es buena o mala suerte.
Ahora bien, el tema del altercado con los niños, creo que la tía debería aprender a manejar sus emociones, que aunque esté enojada o molesta el tratar a los niños como "niñatos maleducados de mierda" hace ver que la mal educada es la señora y no me vale la escusa de que "ella es como es" o "ella es especial" ya que parecería que con eso se justifica todo y no es así.
Además, para mi, creo que en parte la falla o error es de los padres de los niños, si ven que la señora está molesta y no quiere participar en el juego, tendrían que haber intervenido y parado la situación a tiempo, con algo del tipo, "hijos vamos a buscar a otra persona que quiera jugar y tal" y no dejar que las cosas escalen hasta el punto que nos cuentas.
Finalmente, el empleado al decir la frase de loca y tal se extralimitó y la "tía" podría haber pedido hablar con el encargado y poner una queja contra él empleado, sino lo hizo en ese momento pues no creo que que lo deba hacer ahora y mejor que se gaste ese dinero en otro centro comercial para sentir algo de justicia poética