Sexualidad y métodos anticonceptivos/Preservativo femenino

¿En que consiste?

El condón femenino consiste en una bolsita de poliuretano lubricada más o menos parecida al condón masculino pero más amplia. Uno de los extremos de esta funda está cerrado, el lado opuesto del condón tiene un anillo de mayor tamaño y está abierto. Así, este extremo permanece fuera de la vagina y protege los genitales externos.


¿Qué precio tiene?

Es de venta libre en farmacias y cuesta unos 12 euros la caja de dos unidades.


¿Cómo se utiliza?

Para insertarlo, la mujer oprime el extremo cerrado del mismo y lo mete en la vagina. Puede resultar un poco incómodo en un primer momento, pero la práctica facilita su uso.
Es necesario introducir el dedo dentro del preservativo para colocarlo del todo y comprobar que queda derecho. El anillo externo queda por fuera para evitar que haya contacto entre pene y vagina.
Al concluir la relación sexual, es necesario dar media vuelta al anillo externo para evitar que el semen se derrame.


Ventajas:

  • Protege contra la mayoría de enfermedades de transmisión sexual o enfermedades venéreas
  • Puede ofrecer un grado de protección contra el papiloma virus humano, el herpes genital y contra el virus de Hepatitis B.
  • No hay efectos hormonales, ni secundarios.
  • No requiere prescripción.
  • El poliuretano es un material que transmite más calor que el látex, por lo tanto es más sensible
  • Puede ser empleado durante toda la etapa reproductiva de la mujer.
  • La fertilidad regresa inmediatamente después de discontinuar su uso.
  • Puede ser insertado hasta 8 horas antes del coito.
  • Permite que la mujer tenga el control sobre el uso del anticonceptivo.
  • Cualquier tipo de lubricante puede ser usado con el condón femenino, ya que esta hecho de plástico y no de látex.


Inconvenientes:

  • Sólo tiene un 94% de eficacia
  • Disminuye la sensibilidad vaginal.
  • Puede interferir con el acto sexual.
  • Para algunas mujeres puede ser difícil de colocar.
  • Su costo es mayor que el preservativo masculino.
  • No es tan fácil de encontrar en las farmacias.
  • Solo puede usarse una vez.
  • Poco estético por su gran tamaño
  • Se puede romper o deslizar, dado que el poliuretano es un material que se dobla con mayor facilidad que el látex.
  • Puede irritar la vagina o el pene.