Bueno, bueno, después de meterme la gran viciada a Xenoblade X, último de la saga que me faltaba por pasar (juegazo, por cierto), he continuado con mis lecturas, que confío ir incrementando con el tiempo.
Siguen sobre mi mesa los
relatos completos de Kafka, sin prisa y con múltiples pausas, porque por ahora no me están enganchando demasiado, pero espero enmendar tamaño oprobio más pronto que tarde. Rematé
¿Por qué el materialismo es un embuste? de Kastrup, que ya en el primer mensaje estaba a un epílogo de terminar, y me ha gustado tanto que he decidido embarcarme en otro de temática relativamente similar, en tanto que asimilando el primer libro es más fácil entender ciertos contenidos del segundo:
Consciencia: Más allá de la vida del cardiólogo Pim van Lommel, que narra las experiencias cercanas a la muerte (ECM) y de la influencia que ejercen en sus pacientes.
Terminé tres libros:
Una mirada a la oscuridad de Dick, que cuenta la adicción paulatina del protagonista a una droga especialmente perniciosa. La peli también mola, está bastante bien adaptada y el uso de la rotoscopia es todo un acierto. Luego
El aprendizaje del escritor de Borges, que plasma en texto un seminario donde desgrana a unos universitarios el proceso de escritura de uno de sus cuentos, algunos poemas y cómo vertía sus obras al inglés su traductor de aquella época, Thomas di Giovanni. Por último, hoy mismo he finiquitado
La maravillosa historia de Peter Schlemihl de Adelbert von Chamisso, que nos refiere las cuitas del pobre Schlemihl, un chico que, creyendo que hacía el negocio del siglo intercambiando su sombra por una bolsa siempre rebosante de oro, pronto se da cuenta de que el diablo no da puntada sin hilo. Mención especial el epílogo de Thomas Mann.
He empezado también
De la preparación para la muerte y de cómo deber ser tenida en poco del fray Pedro Alonso de Burgos, un venerable eremita de Montserrat del siglo XVI, que a base (por ahora) de citas bíblicas y de Padres de la Iglesia, detalla los distintos tipos de muerte según la vida que hayamos llevado, tanto virtuosa como pecaminosa. Recomiendo leerlo con una Biblia al lado para contextualizar mejor el texto.