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El recibo de la luz ha registrado un incremento del 11% en el tercer trimestre del año con respecto a los tres meses precedentes, después de que el mercado mayorista de electricidad registrase en septiembre los precios medios mensuales más elevados desde diciembre del año pasado y que motivaron la intervención del Gobierno. Echando la vista más hacía atrás, las tarifas han tocado en septiembre su segundo nivel más alto desde 2008, lo que tirará al alza del próximo recibo de las familias.
El mercado mayorista o pool ha marcado un precio para este martes, 30 de septiembre y último día de mes, de 66,98 euros por megavatio hora (MWh), con lo que la media mensual se sitúa en 58,9 euros, frente a los 49,91 euros de agosto y los 48,21 de julio. De esta forma, la media del trimestre se queda en 52,34 euros, un 31% más que los 39,93 euros de media del segundo y más del doble que los 25,8 euros que marcó en el arranque de año gracias a que la alta eolicidad y pluviosidad derivó en un abaratamiento de los costes en el mercado mayorista frente a los 47,58 euros en los que acabó 2013 tras la intervención del Gobierno.
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Como el componente de la energía tiene un peso del 37,48% en el recibo final, frente al 21,38% de impuestos y al 41,14% de los peajes, el incremento trimestral del 31% en el mercado mayorista implica una subida del 11% en la factura final de la luz con respecto al trimestre anterior.
Con vistas a lo que va a suceder en lo que queda de 2014, el mercado a plazo Omip pronostica una leve bajada de precios mayoristas para el cuarto trimestre, del 4,2%. Según estos futuros, el precio medio del cuarto trimestre se situará en 50,1 euros, a razón de 52,1 euros de media en octubre, 48,6 en noviembre y 49,6 en diciembre.
De confirmarse esta previsión, el precio medio del megavatio hora se habrá situado en 42 euros a lo largo de 2014, un 4,8% por debajo de la media de 44,16 euros del año anterior. Esta evolución implicaría un descenso del 1,7% del recibo final, mitigado en parte por la subida del 0,9% de los peajes en enero, de modo que el abaratamiento podría rondar el 0,8%.
La OCU denuncia un "sablazo"
A este respecto, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) lamenta que el final del verano se haya saldado con un "sablazo" en el precio de la luz de los inscritos en la tarifa regulada (PVPC). Según revelan, la tarifa final ha alcanzado en septiembre su precio más alto de los últimos cinco años. Según denuncia, esto ha provocado por la aplicación de un nuevo mecanismo de revisión de precios "impredecible" y lleno de "turbulencias". En este nuevo sistema, el precio se fija conforme a la media del pool en los dos meses correspondientes al periodo de la factura.
El precio más alto sigue siendo el que se marcó en diciembre de 2013 de 63,64 euros por megavatio hora, lo que precisamente llevó al Gobierno a suspender el anterior sistema de subasta por la sospecha de irregularidades. Al final, sin embargo, concluyó que no hubo ni manipulación ni culpables. Hasta que entró el vigor el nuevo mecanismo en abril, el Ministerio de Industria fijó un precio provisional de 48,48 euros. Luego, ajustó la tarifa a los 47,58 euros recogiendo la evolución del mercado, lo que obligó a las eléctricas a devolver dinero a los usuarios.
"Cuando el Gobierno presentó el nuevo sistema para fijar precios, lo vendió como una apuesta para que el consumidor pagase menos en su factura", reuerda la OCU. Pero "la realidad es que este nuevo sistema es impredecible y traslada estas turbulencias directamente a la factura de los consumidores que tienen contratada la tarifa regulada", que son la mayoría.