› Foros › Off-Topic › Miscelánea
Melmoth escribió:La solución:
Un buen palo a tiempo quita muchas tonterías.
cOhe escribió:Adecuando los estudios a los gustos del niño
blitzball_tony escribió:goto escribió:+1
Hay que hacer un sistema que evite que los profesores tiren la toalla y se limiten a cumplir, y que a los alumnos les motive
Que no tire la toalla cuando le llega un criajo de mierda y le pega y él no puede hacer nada porque le denuncian, que tiene una clase llena de esos seres, claro, es muy fácil.
Javiguti escribió:Hay algunos comentarios que son para hacérselo mirar. En fin...
Creo que hay dos tipos de fracasos escolares bien diferenciados. Unos son los que tienen un ambiente familiar hostil, los que pasan, no sólo del colegio, sino de la vida en general. Otros los que ven en el estudio algo tedioso y aburrido, no quieren estudiar porque no les gusta estudiar, no necesitan más razones (no olvidemos que no dejan de ser niños, y si no tienen edad para votar será por algo), y los padres ya pueden decir misa, que seguirá sin gustarles estudiar. En este último grupo está mi hermano pequeño. No será por castigos de mis padres, no será porque podría haber conseguido muchas cosas mediante el chantaje de "si apruebas todas...", que el chaval se niega. Para estos casos la solución creo que pasa por los propios profesores. Un buen profesor no es el que sabe mucho. Es el que hace que te intereses por el tema. La literatura no es aburrida. Hay libros aburridos y hay libros divertidos. Obligarle a un niño de 13 o 14 años a leerse la Celestina desembocará en que asimile que la literatura es un coñazo. ¿Por qué no se les manda leer "El guardián entre el centeno"? Creo que es un libro que un adolescente disfrutará muchísimo más que La Celestina, o que El diario de Ana Frank. En inglés lo mismo. Puedes mandarle aprender una lista de phrasal verbs, o puedes ayudarle a través de películas, de series, de canciones. ¡Será por contenidos amenos en inglés! La historia, la puedes dar como una sucesión de datos y fechas, como un robot que tiene que almacenar la máxima cantidad de información sin comprender, o puedes enseñarles como era realmente la vida en esa época, hacerles imaginar. Las fechas exactas son hasta irrelevantes comparadas con los hechos y las razones que llevaron a que un determinado suceso tuviera lugar. En la historia concretamente, yo era de los que no aprobaba. Un año cambiaron de profesor, y misteriosamente, empecé a aprobar todos los exámenes con una media de 7 u 8. El contenido no difería demasiado, no se puede decir que aprobase porque ponía exámenes más sencillos, simplemente el profesor nos contaba anécdotas curiosas sobre la historia, hacía que prestásemos atención, que tuviésemos curiosidad por saber qué pasaba. En cierto modo, era como el cuento de las mil y una noches. Te dejaba con curiosidad por saber más. En matemáticas o en física y química personalmente nunca he tenido problemas, pero reconozco que los profesores en mi caso daban clases que eran bastante aburridas. La de matemáticas se esforzaba por "hacer las clases divertidas", pero creo que teníamos conceptos diferentes de diversión.
En definitiva, creo que para acabar con el fracaso escolar hay que partir de una obviedad. Son niños. Tienes que ponérselo fácil. No intentes razonar que estudiar es lo mejor para su futuro. Ellos no van a mirar por su futuro. Van a mirar por su presente. Por mucho que te empeñes en razonar. Y si su presente es aburrido, están jodidos.
blitzball_tony escribió:La Celestina me la madaron leer con 10 años en EGB...
Javiguti escribió:Hay algunos comentarios que son para hacérselo mirar. En fin...
Creo que hay dos tipos de fracasos escolares bien diferenciados. Unos son los que tienen un ambiente familiar hostil, los que pasan, no sólo del colegio, sino de la vida en general. Otros los que ven en el estudio algo tedioso y aburrido, no quieren estudiar porque no les gusta estudiar, no necesitan más razones (no olvidemos que no dejan de ser niños, y si no tienen edad para votar será por algo), y los padres ya pueden decir misa, que seguirá sin gustarles estudiar. En este último grupo está mi hermano pequeño. No será por castigos de mis padres, no será porque podría haber conseguido muchas cosas mediante el chantaje de "si apruebas todas...", que el chaval se niega. Para estos casos la solución creo que pasa por los propios profesores. Un buen profesor no es el que sabe mucho. Es el que hace que te intereses por el tema. La literatura no es aburrida. Hay libros aburridos y hay libros divertidos. Obligarle a un niño de 13 o 14 años a leerse la Celestina desembocará en que asimile que la literatura es un coñazo. ¿Por qué no se les manda leer "El guardián entre el centeno"? Creo que es un libro que un adolescente disfrutará muchísimo más que La Celestina, o que El diario de Ana Frank. En inglés lo mismo. Puedes mandarle aprender una lista de phrasal verbs, o puedes ayudarle a través de películas, de series, de canciones. ¡Será por contenidos amenos en inglés! La historia, la puedes dar como una sucesión de datos y fechas, como un robot que tiene que almacenar la máxima cantidad de información sin comprender, o puedes enseñarles como era realmente la vida en esa época, hacerles imaginar. Las fechas exactas son hasta irrelevantes comparadas con los hechos y las razones que llevaron a que un determinado suceso tuviera lugar. En la historia concretamente, yo era de los que no aprobaba. Un año cambiaron de profesor, y misteriosamente, empecé a aprobar todos los exámenes con una media de 7 u 8. El contenido no difería demasiado, no se puede decir que aprobase porque ponía exámenes más sencillos, simplemente el profesor nos contaba anécdotas curiosas sobre la historia, hacía que prestásemos atención, que tuviésemos curiosidad por saber qué pasaba. En cierto modo, era como el cuento de las mil y una noches. Te dejaba con curiosidad por saber más. En matemáticas o en física y química personalmente nunca he tenido problemas, pero reconozco que los profesores en mi caso daban clases que eran bastante aburridas. La de matemáticas se esforzaba por "hacer las clases divertidas", pero creo que teníamos conceptos diferentes de diversión.
En definitiva, creo que para acabar con el fracaso escolar hay que partir de una obviedad. Son niños. Tienes que ponérselo fácil. No intentes razonar que estudiar es lo mejor para su futuro. Ellos no van a mirar por su futuro. Van a mirar por su presente. Por mucho que te empeñes en razonar. Y si su presente es aburrido, están jodidos.
eoliTH escribió:- Haciendo que no sea obligatorio ir a clase hasta los 16. El que no quiera estudiar que no estudie, no pasa nada la vida sigue y hay trabajos para los que no hace falta estudiar.