A ver, se comenta lo siguiente: los secuestradores, posiblemente tres y una ecuatorianos. La secuestrada, madre del bebé, colombiana y juzgada y absuelta en el pasado por tráfico de drogas. El compañero sentimental, Fernando, empresario de éxito en cuestión de tragaperras.
No sé, pero a mí me huele muy raro. Precisamente, Matadepera es una población de gente con mucho money y hay unas torres que te cagas.