Galicha escribió:Creo que depende mucho del tipo de persona y del pueblo. Igual con esto del virus mucha gente se lanza al pueblo pero me da a mí que muchos se vuelven no tardando mucho. Yo soy medio de pueblo y creo que los urbanitas tenéis idealizado el pueblo.
Vivir en un pueblo supone mayores gastos para todo menos para vivienda (desplazamientos, desgaste del coche), tener peores servicios: en muchas zonas no hay fibra ni buen 4g con lo que tienes un ADSL que se corta a todas horas y es imposible ver una película en streaming aunque vas a pagar lo mismo que uno de ciudad, el agua puede ser mucho más cara, si tienes hijos igual no van a tener mucho futuro, no tienes colegios donde elegir, la vida cultural se queda en nada, la vida social baja bastante así que cuidadito que el pueblo no es para todo el mundo. Yo en mis cuarenta y muchos me gusta el pueblo el fin de semana y/o fiestas y tal pero no veo ahora viviendo todo el año salvo que lo que le pidas a la vida sea muy poco.
Otra cosa que puede ser una sorpresa muy desagradable y conozco ya varios casos: cuidado con gastarse un pastizal en una casa en propiedad que luego si la tienes que vender igual no tiene mercado. El finde pasado precisamente estuve hablando con un amigo en el bar del pueblo y resulta que necesita vender la casa y ni bajándola un 30-40% se deshace de ella. Cuidadín.
Y eso por no hablar de que hay que estar acostumbrado a salir a la calle y no ver a nadie.
Una cosa que me resulta muy sorprendente es lo mucho que valoráis la "tranquilidad" y eso que supongo que en general sois gente más joven que yo.
Es que aquí, para variar, se está hablando de "pueblo" de forma que más bien uno se imagina una aldea.
Hay pueblos que tienen supermercados de todo tipo, centros comerciales al lado, hospital, ambulatorio y comisarías en el núcleo o a la entrada/salida, etc etc.
Lo de la fibra todavía tiene un pase, lo del 4G sí creo que estamos ya hablando de pueblos o aldeas remotas.
Luego el tema del gasto... Lo de la vivienda parece claro que, de media, sale más barato fuera de las ciudades. ¿El resto?. Si uno usa coche en una ciudad para hacer 5/10 km por ejemplo, seguramente gaste parecido a alguien que use su coche para hacer 10/20 km por carreteras convencionales con un menor desgaste de componentes como el embrague. Si tiras de transporte público pues algo ahorrarás, aunque la libertad del coche tampoco la tendrás. Y si tienes el trabajo y todo lo que te interesa al lado de tu piso, entonces sí que la jugada te saldrá redonda.
Pero no entiendo dónde están los mayores gastos del "pueblo". Realmente sigo sin tener claro (creo que ni yo ni nadie...) de a qué nos referimos con "pueblo". Porque no es lo mismo cuatro casas de hace 100 años en medio de una montaña que un núcleo urbano de 10.000 habitantes.
Lo de los hijos... pues seguimos en la misma línea. Tú puedes vivir en el centro de Madrid y mandar a tus hijos a un colegio multicultural y, a la vez, puedes vivir en un pequeño pueblo y mandar a tus hijos al colegio más pijo de tu comunidad. Aparte, futuro... el futuro lo van a tener igual de negro todos los que hoy son niños, así que en ese sentido que nadie se preocupe...
El tema de la "vida cultural"... ¿Hablamos de teatros, óperas, museos y demás?. Pues se coge el coche y vas a la ciudad a disfrutar de la vida cultural, de la misma manera que alguien de la ciudad se coge el coche y se va al pueblo a respirar aire libre de contaminación. ¿Dónde está el problema?. Entre semana, seas de pueblo o ciudad, la mayoría de la gente directamente no tiene vida y no es hasta el viernes por la tarde cuando salen todos desesperados a "vivir".
Es como para el tema del ocio nocturno. Yo, cuando salía de noche con frecuencia, tenía dos opciones: bajar a la ciudad más cercana en coche/bus/taxi/caminando 30 minutos o irme directamente a 30 km en coche/bus/tren y luego caminar hasta la zona de copas. Era una putada, en invierno podía dar por culo si te pillaba la lluvia y demás... Pero bueno... Está claro que más cómodo era para los que se piraban y en unos minutos andando estaban en sus casas, pero tampoco era el fin del mundo. Algunos incluso tenían que caminar un buen tramo por eso de que no todo el mundo en una ciudad vive a pocos metros de donde quieren ir...
Lo de la vida social más de lo mismo... Según cada uno, puede aumentar o puede disminuir. Si uno se lo monta guay en una casa y tiene piscina, parrilla, incluso porterías o canastas para niños (o no tan niños...), cine en casa guapo y lo que sea (hay mil historias)... Pues igual resulta que hasta quedas más con los amigos de lo que harías en la ciudad y te gastarías un cacho menos que si anduvieras de bar en bar pagando 2 ó 3 € por una cerveza o una Coca-Cola. Y vuelvo a decir, que hay pueblos y pueblos... Puedes vivir en un pueblo y tener la vida social de una ciudad. Estar a diario desayunando con algún amigo o compañero de trabajo, por las tardes quedar con alguien para hacer deporte, por las noches tomando algo en una terraza... Es volver a lo mismo, si estamos hablando específicamente de vivir en una aldea remota que se encuentre a 30 km de cualquier núcleo urbano en el que haya al menos una panadería o de qué estamos hablando.
Pedir poco a la vida... Uffff... esto daría para un debate de por sí. Estar todos los días tomando cañas en los bares y los fines de semana ir elegante al teatro, ¿eso es pedir mucho a la vida?. Casi que prefiero quedarme en casa haciendo compañía a mis gatos, me llena más y me sale más barato...
Lo del precio de compra y venta... Otra vez de vuelta a lo mismo. Sí, si compras una casa en medio de la nada... pagarás una mierda por ella, pero también te pagarán otra mierda por ella cuando la quieras vender. O igual compras una casa en un pueblo cotizado y en unos años te encuentras con que la propiedad se ha disparado de precio. Pues lo mismo que en una ciudad. Compra un piso decente en un barrio obrero normal y deja que, con el paso de los años, se llene la zona de morralla. A ver cuánto te pagan por ese piso para estar rodeado de okupas y demás maravillas de la naturaleza que nos llegan de todas partes del mundo. Seguro que te lo quitarán de las manos... pero igual te lo quitan los okupas de al lado en cuanto vean que sales por la puerta para ir a trabajar...
Nuevamente, lo de salir a la calle y no ver a nadie... Realmente creo estamos hablando de un pueblo tipo el de la cabaña del abuelo de Heidi, otra cosa no me lo explico. Y, bueno, entre no ver a nadie y ver a tíos persiguiéndose con cuchillos y apuñalándose hasta la muerte como esta misma semana unos dominicanos por Madrid... Pues... Casi que preferiría no ver a nadie la verdad. Es que a ver... nadie o latinos drogados con cuchillos en la mano... uhmm... definitivamente prefiero no ver a nadie.
Yo tengo 34 años y la verdad es que doy una importancia enorme a la tranquilidad. Pero enorme. El día que viva donde pretendo (calle muy tranquila) y tenga mono de jaleo y barullo, no tendré más que cogerme el coche y conducir 15 minutos. Luego de vuelta a la tranquilidad de mi (futura) casa. De hecho, en verano con el tema del turisteo, si quiero ver a un montón de gente y darme de ostias por sentarme en una terraza, no tendré que caminar ni 10 minutos de reloj para estar rodeado de personas por todas partes. El resto del año tendré numerosos restaurantes a tiro de paseo (15 minutos andando o menos) para ir sin reserva y sin nada y pudiendo disfrutar de una comida tranquila (y de
calidad) sin jaleo de ningún tipo. Aparte, a 10 metros de mi propiedad tendré un Paisaje Protegido y una senda verde que comunica con mi calle, la cuál mide 250 metros y no tiene salida y sólo es transitada por los pocos vecinos que ahí viven. A lo que hay que destacar la escasa velocidad de tránsito por las propias características de la calle.
Este punto es importante, porque si uno busca poco tráfico de coches y personas, nada como una calle sin salida. También con matices claro, porque si son todo bloques de pisos nadie te garantiza nada. Pero lo que tampoco sería inteligente es irse a un pueblo, incluso relativamente aislado, para acabar comprando una casa que esté pegada a una carretera que tenga un tráfico relativamente alto. Esto mismo hizo un familiar lejano mío y lo único que ha logrado es que su perro durara unos pocos meses. Un día abrió la puerta de su finca, el perro se adelantó un par de pasos y un coche se lo llevó...
Por eso la clave es lo que uno quiera y el equilibrio entre lo que quiere tener y a lo que tampoco le apetece renunciar. Yo en un pueblo en medio de la nada no querría vivir y mucho menos para autoabastecerme. Esto último creo que la gente no sabe lo que es y lo que implica... Y si tienes animales ya tienes que mentalizarte de que es un trabajo de 365 días al año. Tampoco me gustaría vivir en una zona en la que apenas hubiera cobertura o en la que el internet más rápido fuera digno de los años 90. Pero no hace falta irse a un sitio así para vivir en un pueblo o para buscar un poco de tranquilidad o naturaleza.