The Hunter Capitulo 3

Capítulo 3: En Busca De La Verdad

Rick decidió irse a su casa, situada a las afueras de Corvus. Era una vieja mansión que se fue heredando de generación en generación, pero que aún mantenía su majestuosidad. Sin embargo, era la típica mansión familiar: un inmenso jardín, innumerables habitaciones, gigantescos salones, un garaje con varios coches y motocicletas, ... y una grandiosa biblioteca.
De camino a su casa, Rick no paraba de pensar el lo que le había acaecido momentos antes. Deseaba saber porqué había actuado así frente al atracador y qué relación mantenía con Baladar, así como la veracidad de sus palabras, pero tenía miedo de lo que podía descubrir y de lo que podía pasar de ahora en adelante.
-“Qué relación pueden tener Mark, mi padre y ese hombre?, cómo sabía que el libro que me mencionó era el preferido de mi padre?”. Se preguntaba sin cesar.
Numerosas preguntas sin respuesta aparente. Rick no paraba de darle vueltas a la cabeza cuando llegó a su casa. Abrió la verja con el control remoto, y dejó el coche en el garaje. Nada más entrar en la mansión, se dirigió a la biblioteca sin mediar palabra con su mayordomo, Socri, diminutivo de Sócrates por el cual le llamaba en plan cariñoso. La biblioteca llevaba un largo período de tiempo cerrada, puesto que su padre se pasaba la mayor parte de su tiempo allí, hasta que una enfermedad degenerativa de postró en la cama hasta el momento de su muerte 16 años atrás. Sin embargo, cuando Rick entró, parecía como si el tiempo se hubiese detenido en aquella habitación, que permanecía como tiempo atrás. Sin demorarse ni un momento, se dirigió a la estantería donde se encontraban los libros ordenados alfabéticamente que empezaban por la E, pero no encontró el libro. Buscó también en la S, pero obtuvo iguales resultados. Pero sin saberlo, algo le incitó a mirar en otra estantería que no recordaba que se encontraba allí, en la que estaban perfectamente ordenados los libros de orden mítico-legendarios, y cual fue su sorpresa cuando encontró el libro, “El Sendero de la Verdad: Citas de la realidad”. Se dirigió a la mesa de lectura, y se pasó un largo tiempo con el libro cerrado, hasta que se quedó dormido, pero no leyó el libro.
A la mañana siguiente, Socri, el mayordomo, despertó a Rick.
-“Señor, Señor despierte, tiene una llamada”. Susurró el sirviente.
-“Cuantas veces tengo que repetirte que no me llames Señor, mi padre murió hace mucho tiempo y él era el único señor de esta casa. Además,”. Continuó Rick.-“Hoy no tengo que ir a trabajar, así que déjame dormir”.
-“Ya lo sé Señor, pero es el señorito Mark, que insiste en que debe hablar con Ud. sobre un tema muy importante.” Informó el mayordomo.
-“Dile que ya hablaré con él después, que ahora tengo cosas que hacer”.
-“Está bien Señor, haré lo que Ud. mande.” Y marchó a transmitir los deseos de Rick.
Después de quedarse solo en la biblioteca, decidió que debía abrir el libro de una vez por todas y así lo hizo. Cogió el libro, lo sujetó breves instantes con sus manos, y al empezar a abrirlo, un sobre cayó al suelo. Volvió a dejar el libro en la mesa y recogió la carta, que iba dirigida a él, de parte de su padre.

“ Querido Rick;

Si estás leyendo esto significa que Baladar ya te habrá encontrado y te lo habrá contado todo. Hijo, sé que es difícil de creer, pero es cierto. Me hubiese gustado estar ahí para cuando comenzase tu adiestramiento, pero parece que mi cansado corazón ya no podía esperar más, y me he visto postrado en esta cama mientras te escribía esta carta ... No temas de tu destino, el futuro del Mundo está en tus manos ...

Conrad Damond ”

Rick leyó la carta varias veces hasta que se convenció de que era cierto, todo lo que le estaba pasando no era un sueño, aunque para él era una pesadilla. Las últimas palabras de su fallecido padre le hicieron darle muchas vueltas a la cabeza mientras que innumerables preguntas sin respuesta se le pasaban por la mente. De pronto, Rick recordó que tenía que llamar a Mark, ya que él era el responsable de su adiestramiento