Vamos a ver, que os veo con un poco de cacao mental:
Supongamos que, en todos los casos, tanto el móvil del emisor como el del receptor son de compañías españolas.
Si tú estás en el extranjero y envías un sms, te cuesta más dinero, sobre 60 céntimos + iva antes, ahora será algo más. Al que recibe, evidentemente, no le cobran un céntimo, entre otras cosas porque no puede elegir si recibe o no el mensaje.
Si tú estás en España y envías un sms a alguien que está fuera, pues te cuesta a precio normal y el que recibe tampoco paga nada, por el mismo motivo que antes, porque no puede elegir.
Si tú estás en el extranjero y llamas a alguien, tú pagas la totalidad de la llamada internacional y el que la recibe, que está en España, no paga nada. No habría motivo para que le cobrasen, entre otras cosas porque no tiene por qué saber desde dónde le llaman.
Si tu estás en el extranjero y te llaman desde España, el que te llama paga la parte nacional de la llamada, porque no tiene por qué saber que tú estás fuera. Y tú, que sí sabes que estás fuera y en este caso sí decides si aceptas o no la llamada pagas la diferencia entre la llamada nacional y la internacional.
Creo que así queda claro, ¿no? Si hay móviles de distintos paises, entonces es similar, pero cambiando que tú sí sabes que mandas al extranjero, por tanto el sms siempre cuesta como al extranjero al que lo manda y al que recibe no le cuesta, esté donde esté. En cuanto a las llamadas, pues a tí te cobran la llamada internacional si llamas a un móvil de otro país, y si además él está en un tercer país pues le cobran nuevamente la parte internacional.
¿Más dudas?