Cuánto te voy a echar de menos... Son muchos años juntos, 19 el próximo 6 de marzo, pero para mí el tiempo ya, no creo que vuelva a pasar...
Desde el día que naciste he podido contemplarte, y a cada día doy gracias a Dios por ello. Te he velado cientos de noches, una día porque te salían los dientes, el otro porque te rompieron el corazón... Has jugado conmigo desde cuando... los 5 años?. Te columpié empujada por el viento, y te sostuve en mis brazos cuando pudiste llegar a mí.
A mi lado has leído, estudiado, reído y amado, escrito cartas de amor y desamor, y he sido testigo de todos tus secretos.
En mi piel has grabado tu nombre, y nadie, nisiquiera ese llamado tiempo, podrá hacer que desaparezca.
Hemos contemplado lluvias de estrellas, amaneceres y atardeceres... Te he visto mirar triste la lluvia a través de la ventana, mientras yo bailaba feliz bajo sus gotas de vida...
He recogido mil deseos dichos al cielo en un grito que no se oye, y he cumplido los que estaban en mi mano.
En las desapacibles noches de otoño, cuando estabas en tu cama arropada, te cantaba tiritando la nana de las hojas... y todo porque te amaba...
Hace dos años caíste enferma, mucha preocupación y medicinas. Pálida como nunca te había visto mirabas desde la cama un cielo, que parecía ya más cercano...
La casa susurraba rezos y hace treinta días te fuiste para no volver...
Tus padres han llorado tu muerte y yo también, pero nadie puede oirme. Ya no estás, y nunca sabrás el dolor que siento... No sabrás lo que lamento no haberte podido hablar, abrazar o consolar...
No creo que te acuerdes de mí, porque poca gente recuerda a un arbol, de pie, junto a su ventana, que ahora sigue cantando en otoño, su ahora triste nana; la nana de las hojas muertas...
Se que es mu raro, pero espero que os guste. Tenía la idea de hace un tiempo y hoy la he puesto en líneas, aqui está, judgad vosotros.