Joder cómo estamos... Un suicida creo que yo que le importa bastante poco el resto del mundo, así que intenta acabar con su vida de la manera que cree más trágica.
¿Cosas que se pueden extraer de esta historia? En mi opinión que una señora de ochenta años ha servido (aunque de forma involuntaria) para entregarle otra oportunidad a una chica de dieciocho, respecto a la cual espero que la aproveche valorando un poco la vida. O intentándolo al menos.
Es triste que muera alguien por culpa de otra persona pero, de todos modos, el resultado es el que es. Yo, no sé vosotros, veo afortunado este hecho. La chica tiene la posibilidad de volver a vivir, o de empezar a hacerlo de una vez.
Por lo demás... Premio Darwin 2010. Se lo deberían dar a la chica, pero igual se lo encasquetan también a la señora.
Un saludo.