Buenas a todos
Os cuento este caso, cuyas cuotas de surrealismo alcanzan las cimas más altas, para ver si alguno puede aportar algún consejo. Y a modo de desahogo, también. 
Empezando por lo más reciente: Mi cuñado se ha embarcado en una operación financiera de una cuantía absurdamente elevada (2.5 millones de €) solicitando un préstamo a una entidad bancaria internacional, y en un momento determinado de la operación, y estando esta presuntamente aprobada, le han exigido como requisito imprescindible abonar un seguro financiero (o algo por el estilo) de unos 300.000€. 
Cifra que él no tiene. Si el seguro valiese 30€ entonces si, porque mi cuñado está prácticamente en la ruina. Solución: pedirle a su padre que solicite un préstamo al banco (un banco diferente al del préstamo de 2.5 kilos) para costear dicho seguro. ¿que puede salir mal?
Asombrosamente mi suegro accede y contratan el dichoso seguro. Se entiende que una vez realizado esto, la entidad bancaria procedería al pago del préstamo de marras, pero según mi suegro todo son largas y "hay que esperar".
Es decir, en teoría la operación estaba aprobada, el pago del seguro financiero era el requisito final. Pero una vez hecho, y esto fue en Julio de este año, el banco sigue sin soltar la pasta y diciendo que "ahora es que hay pagar la comisión de no se qué" o "ahora hay que esperar a que no se cual", etc.
Abro un inciso para aclarar que mi Suegro no parece tener mucha información, ni probablemente entender del todo bien la que ya tiene. La operación la lleva mi cuñado, y es él quien se supone (se supone) que sabe realmente lo que está pasando. Aprovecho para comentar que mi cuñado es una persona a la que no le confiaría ni que me guardase un clip.
Volvamos al préstamo. Dado que mi suegro ha contraído una cuantiosa deuda para pagar el seguro (2.000€ mensuales) PERO como la operación sigue en stand-by y la pasta no llega, han llegado a un punto critico en el que mi suegro, superado por las circunstancias, ha decidido poner su piso en venta. Dado que tiene un valor considerable (buena ciudad, céntrico, grande y no muy antiguo) con el dinero obtenido por la venta liquidará el préstamo del seguro y se irá a vivir de alquiler. Con lo que le sobre y la jubilación pues a ir tirando como pueda.
De toda esta movida nos hemos enterado hace escasamente dos días. 
Mi mujer y su hermana están, lógicamente, abrumadas con esto. Sabíamos que su hermano (y su mujer) estaban en un proyecto loquísimo para montar una granja de pollos, algo absolutamente disparatado y ridículo. Sobre todo viniendo de una pareja que ni siquiera trabaja (poniendo las excusas más peregrinas, han tenido ofertas de empleo) y que viven en casa de los citados suegros ya que, lógicamente, si no trabajas no tienes dinero y esto ultimo implica habitualmente la incapacidad para tener un hogar propio. Sumamos dos niños pequeños a los que dar de comer, vestir y atender y ya tenemos ahí el perfil de ambos emprendedores. Voy a montar ciudades en la Luna que seguro que es sencillisimo y me forro. O mejor en Jupiter, que es gaseoso pero me da igual.
Hemos aconsejado al suegro que vaya a ver a un abogado, pero no quiere: teme meterse en un interminable proceso de esperas que culminen en nada, y que por el camino le dejen sin el poco dinero que le queda. Prefiere vender y volver a empezar.
Le he insistido que, al menos, hable con un asesor financiero profesional. Sin meterse en denuncias ni nada, simplemente que un profesional valore si le han engañado, o sencillamente se han metido en camisa de once varas. Alguien externo que le pueda orientar de alguna manera. Pero es imposible.
¿Consejos?