Yui K, el tema es que un ministerio de igualdad no sé yo por qué tiene que entregar 800k+ euros en investigaciones centradas solo en la mujer, eso por un lado. Por otra parte digo yo que la genitoplastia la hará un cirujano, y un cirujano ha de saber de sobra cómo es un clítoris (ya que se habrá especializado). Además, en cualquier caso, yo creo que debería ser el Ministerio de Sanidad quien financiase este tipo de estudios, no sé, es como yo lo veo.
Si a eso le añadimos las aparentes connotaciones y el pulso que están haciéndole al sentido común por sus santas peras, veo que es un despilfarro. Porque la igualdad para la mujer no es un mapa de excitación de su clítoris, es una ley que abogue por sus capacidades, que la defienda cuando ha sido injustamente tratada, que la ayude para que hombres y mujeres cobren igual y tengan un puesto de trabajo en función a sus méritos, etc. A eso es a lo que yo creo que debería dedicarse el ministerio de igualdad, en mi opinión. Se creó por ciencia infusa, y ahora tiene la total libertad de entrometerse en labores que dudo sean de su competencia con el mero hecho de relacionarse con su causa solo semánticamente. La genitoplastia, además, también puede ser para transexuales, entonces qué, se crea un ministerio de igualdad para transexuales y se destinan otros 26000 euros para lo mismo, cuando Sanidad (o Investigación y Ciencia) podría hacerlo del mismo modo y sería válido para todos, además de ser de su más estricta competencia.
El despilfarro está implícito en que hacen lo que no deben hacer, y que cuando mueven el culo lo hacen a destiempo. Y eso es algo que hemos visto todos. Es que ya vale. Que un cirujano tiene la especialidad en los campos que elige. Un mínimo de respeto, por favor.
Además, de las 22 subvenciones de investigación (por llamar a eso de algún modo) 21 fueron para mujeres. Dudo mucho que el 99% de los estudios interesantes que fueran propuestos correspondiesen solo a mujeres. Todos excepto uno. Es que es muy triste que se dediquen a vengarse de un trato injusto que ya podría haber pasado al olvido si no fuera porque están empeñadas en un rencor sexual, en un hembrismo absurdo.
Sumidas en una hipocresía esencial.