Que la enseñanza en inglés ha mejorado, está claro, pero aún falta un LARGO camino a efectos prácticos para conseguir algo así. Sigo viendo las clases de inglés como algo aburrido y monóntono en lo que solo aprendes cosas teóricas.
En 2º de bachillerato (y por eso dije que fue un profesor fantástico), tuve uno con el que nos pasábamos todo el día de cachondeo. Hablando, contando cosas de la vida cotidiana... (todo en inglés, claro), enseñándonos cosas coloquiales que no vienen en los libros, y si tenía que explicar algo lo hacía a su manera ya que pasaba del temario totalmente.
Todos aprendimos un montón, incluido yo (excepto los casos perdidos porque tienen falta de base de no haber aprendido por maestros incompetentes en los primeros años), más que en todos los demás años juntos. Si desde pequeñitos nos tuviesen con maestros así, creo que los resultados serían mejores.
Puf... yo en preescolar y primaria tuve a LA MISMA maestra que se pasaba las clases poniendo radiocasettes y con la pamplina de las passwords esas de que cada día aprendías una palabra, y puntuaba más el colorearla que saber cuál era. ¡A ver, si me he aprendido el significado de sorcerer no es por las passwords, sino jugando a simon the sorcerer!