Todo lo correcto y válido que puede ser el documental, se pierde cuando se utiliza (como siempre) al nazismo para criticar un colectivo u organización social. La utilización por parte de determinadas mujeres de las leyes para en un proceso de divorcio denunciar malos tratos y así valerse de la legislación para conseguir unos fines, es un conflicto social cierto y que se merecía más contención por parte de quienes han realizado el vídeo para que no se les acuse de "machistas" a las primeras de cambio. Las denuncias falsas son una lacra y por mucho que el buenísmo y la clase política no quieran entrar a la polémica, si tanto se llenan la boca con la palabra "igualdad" deberán de hacerlo.