El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) considera que algunos de los ex directivos del Banco de Valencia pudieron provocar un agujero en la entidad cercano a los 137 millones de euros, por lo que solicita el embargo cautelar de las cuentas bancarias y bienes de todos los denunciados.
Según la denuncia presentada por los actuales gestores del Banco de Valencia, intervenida por el Banco de España en 2011, los ex directivos de la entidad deben responder por la responsabilidad civil que se ha derivado de los delitos de los que se les acusa: estafa, administración desleal y apropiación indebida.
La denuncia se dirige, principalmente, contra el ex consejero delegado del Banco de Valencia Domingo Parra, contra su socio Aurelio Izquierdo y contra el empresario Eugenio Calabuig.
De acuerdo con el escrito, Parra ha intervenido en una serie de operaciones "de dudosa racionalidad económica" al haber obtenido, por vía directa o indirecta, beneficios en perjuicio del patrimonio del Banco de Valencia.
Operaciones 'de dudosa racionalidad'
También se ha visto beneficiado, a través de la sociedad Gestor Inversiones Izpa, Aurelio Izquierdo, que fue nombrado consejero delegado de la entidad en sustitución de Parra en octubre de 2011 y, con posterioridad, presidente ejecutivo de la misma. Algunas de estas operaciones, señala la denuncia, se llevaron a cabo a favor de empresas vinculadas al presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig.
Estas operaciones tienen que ver con la sociedad de inversiones financiera Agval y con Capital Residencial, en la que han participado de forma relevante, como autores o partícipes, ciertos integrantes de la familia Calabuig.
En este sentido, la familia Calabuig recibió dos créditos del Banco de Valencia por 48 millones de euros, que posteriormente se incrementaron hasta los 54 millones.
'Vaciamiento de la entidad
En consecuencia, destacan algunas operaciones como la compraventa de participaciones de la sociedad Inversiones Financiera Agval en 2008, la adquisición de acciones de la sociedad Costa Bellver o la concesión de financiación a favor de la sociedad Capital Residencial.
Tanto Parra como Izquierdo vendieron sus negocios inmobiliarios a Calabuig, quien acordó en 2008 pagar a Izquierdo y a Parra 12 millones por las sociedades con las que operaron en el litoral valenciano.
Además, el escrito pone de manifiesto el vaciamiento patrimonial al que se ha visto sometida la entidad, que ha recibido 4.500 millones de euros de dinero público y que ha pasado a estar administrada provisionalmente por el FROB.
Siento abrir un hilo más sobre lo mismo de siempre, pero quiero que le quede claro a la gente el ROBO que se ha llevado a cabo durante todos estos años.
Si se empieza a mover algo contra esta gente (como esta medida del FROB), el tiempo lo dirá, pero espero que no salgan impunes mientras la gran mayoría de la población va a pasarlas putas durante muchos años. Yo ya no se quién tiene que mover ficha para encarcelar a esta gente, pero espero que si el Gobierno se pone duro con todos, lo haga con este tipo de gente lo primero de todo