Ahí estás... ya te veo, maldito. Me esperas con esos,
con tus a veces falsos, con tus siempre brillantes,
con tus ¡Joder! burlones ojos, mientras juegas esa ambigua mueca,
que tanto conocemos, que tanto crees que temo.
¿Qué esperas, que las heridas producidas por batallas que libré,
con tus ya viejos hermanos, supuren, que me detengan?
¿Qué esperas, que el agobio que presupones me produce verme luchar
con tus miles, de aún por llegar sucesores, haga tropezar mis pasos, vacilar mi letra?
¿Acaso esperas, insisto... acaso esperas, que me plantee algún día no afilar mis garras,
temiendo que contra tí no sirvan ya de nada?
Déjame decirte entonces, mirándote a esos ojos,
que tus ya muertos hermanos me dieron la experiencia, que han forjado éste carácter,
que tus futuros vengadores aumentan sin saberlo,
mis ganas de esperarlos, y encontrarlos, mis ganas de vencerlos,
y que mientras quede en mí un suspiro de alegría, de esta ilusión por vivir mi vida,
te seguiré plantándo cara con pasión, no te atrevas a dudarlo, día a día.
Mientras viva.
PD: Mi primer post en este foro de literatura. Es algo escrito en un momento de transición, es una declaración de principios a ese futuro juguetón y algo cabroncete con el que tantas veces hablamos. Espero que os guste, y que lo entendáis. Muchos saludos a todos, espero que nos veamos por aquí a menudo, creo que me gustaría hacerme asiduo a este foro. Saludos a todos!