Con respecto a la limpieza, sin duda notarás mejoría sólo con limpiarle el radiador y quitarle las pelusas que se acumulan a la salida del ventilador. Si además le cambias la pasta térmica, mucho mejor.
Eso sí, ten en cuenta que para acceder deberás desmontar el ordenador prácticamente entero.
Pero con respecto al SSD, no lo veo buena idea. Ganarás mucho en el arranque y en la entrada/ salida de hibernación, pero en el rendimiento global no tanto y perderás bastante capacidad de almacenamiento, sin contar con que si no me equivoco lo más que soporta es SATA2, con lo que de entrada pierdes la mitad del rendimiento que un SSD te puede ofrecer de conectarlo en SATA3.
Un SSHD, por otro lado, sí lo vería más lógico.
En cualquier caso, por las prestaciones de ese equipo, usarlo para algo más que ofimática y multimedia (gráfica integrada con su respectiva memoria compartida DDR3) son ganas de pasar berrinches.
Limpieza y punto, no te gastes un duro en él.