Tengo el sobremesa de un amigo, y le pasa algo rarísimo, así que me lo ha dado a ver si se lo puedo arreglar. La cosa es que me tiene rallada la cabeza cosa mala.
Hace unos días le cambió la placa base {Gigabyte GA-Z170-Gaming K3-EU }, la memoria ram {Corsair Vengeance LPX 16GB}, el procesador {6700K} y el ventilador {Noctua NH-D15}. Discos duros {un ssd y dos mecánicos}, la caja, la gráfica {nvidia 980} y la fuente las conserva {gigabyte 750watios, no gold ni bronce ni nada}.
La cuestión es que el PC se reinicia cuando no tiene carga de trabajo suficiente {esto es: estando en Windows con tareas de ofimática normales, como navegando} pero jugando o ejecutando programas de testing {como burnintest} no... había pensado que podría ser cosa de la ram, la fuente o la placa, ¿pero por qué cuando el PC va a tope no hay ningún problema y sólo pasa cuando está en reposo? He ejecutado diversos programas de testeo durante varias horas con todos los componentes, juntos y por separado, y ni un ciclo de error, así que no sé qué hacer ya. A ver si podéis ayudarme.
Añado más info: aunque se esté ejecutando un juego en segundo plano el PC no se reinicia, aunque sea el juego más cutre del mundo, o esté simplemente en el menú.
Por cierto,tiene Windows 10 64 bits, sin formatear tras hacer el cambio.