Que pena que transmitamos esa imagen al exterior, pero es lo que nos toca, nos lo hemos ganado a pulso y no merecemos menos. Cada maldito abuso del gobierno o recorte lo recibimos de brazos abiertos y sentaditos en el sofá, no sea que nos despeinemos, pero basta que ganemos a alguna competición deportiva para tomar las calles.
Y ahora llegarán los pro-deporte a decir que también tienen derecho a celebrar sus triunfos y el ciclo volverá a comenzar, y así por lo siglos de los siglos. España, ¿que te han hecho la recua de insensatos que viven sobre ti?