"Abro los ojos" cap.5
UN DIA MAS PARA ELENA
Si tuvieramos que destacar una cualidad de Elena podríamos hacerlo únicamente compartiendo quince minutos con ella. La observación. Una mirada que inquieta, ojos vivos que regalan sentimientos allá por donde van. Elena es armonía, es dulzura, es darle mil vueltas a una frase, es hablar sin querer.
Elena convierte un desayuno en un regreso a la infancia, vierte ternura sobre la gente, duerme acompañada de su osito. Vive, sueña, sueña, vive. En constante transición entre sueño y realidad, una flor le basta para sentirse viva.
Elena es una chica rebelde pero responsable y consecuente con todo lo que hace. En muchos aspectos se parece a un tío. Siempre con pantacas anchos y camisetas ajustadas. Su colección de piercings parece el muestrario de la tienda donde se los hace. Cuatro en cada oreja, uno en la ceja, dos en la nariz, otro en la lengua y otro en el labio inferior, dos en ambos pezones y otro en el ombligo. Encima del coñito una bonita y discreta mariposa tatuada. Y la dulzura tomó forma.