Bueno un capitulo mas... Este dedicado a Ninfa que me a halagado tanto (no me olvido de ti ninguno ni de todos los lectores que me hacen el gran favor de leerme)
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Nos habíamos despedido de Luis y Susana a la salida del parque. Luis me había comentado que había escalado muy bien, y quedamos para volver a hacerlo al día siguiente. Susana nos había despedido con un beso a Laura y a mí. Con el consiguiente sonrojo y una mirada celosa de Laura. Habíamos hablado un poco durante el camino a mi casa, me entere de que Susana y ella habían estado hablando acerca de antiguos novios, aunque no entro en detalles, como yo no le mencione la confesión de Luis, que seguía en mi mente.
Deje las cuerdas y los aparatos en la entrada y salude a mi madre, mi padre también estaba en casa, aunque no despego la vista de su periódico le dedico un escueto “hola” a Laura, mi padre solia ser parco en palabras...
Subimos las escaleras y nos encerramos en mi habitación. Laura se sentó en el extremo de la cama y yo me acosté dejando reposar mi cabeza en sus rodillas. A laura le gustaba estar así, acariciarme el rostro mientras hablábamos. Y Por que no… a mi no me desagradaba estar tan cerca de su piel, disfrutaba de sus caricias cerrando los ojos y dejándome llevar a un mundo de tranquilidad.
-¿Qué te dijo Luis? –Pregunto Laura tímidamente- ¿Qué te contó allá arriba que estás tan pensativo?
Yo abrí los ojos y la mire dulcemente. Su bello rostro estaba a un palmo del mio, sus ojos verdes se perdían en los míos. Su respiración acariciaba mi rostro… Cierto que Luis me lo había dicho en tono de confesión pero no podía negarle nada a Laura.
-Me hablo de la razón por la que dejo el deporte… -Conteste sin aventurarme a contarle mas-
Laura dejo de acariciarme y me miro fijamente…
-¿Temes que te ocurra lo mismo? –Pregunto Laura preocupada-
-Quizás… en cierta forma… -Conteste dudando…- No se que creer, pero Laura, tengo una cosa bien clara y es que te quiero…
-Yo también te quiero, tonto, -Dijo Laura y tras darme un beso metio la mano en su bolso y saco un pequeño objeto-y no te preocupes por que usaremos esto…
Lo que laura sostenía en la mano era sin duda un preservativo, me quede callado y tome el preservativo y lo estuve mirando unos segundos…
-¿Pero como…? –Me atreví a preguntar en un susurro-
-Susana me lo contó todo –Contesto laura- y fue ella quien me dio esto… y algun que otro consejo….-
-¿Consejos…? –Dije mas ruborizado que nunca… Primero mi novia me había dado un preservativo y ahora me decía que una mujer casada le había dado consejos, casi no podía respirar….-
-¡Perdón! ¡Perdón! –Dijo mi madre que había abierto la puerta y observado la escena…- Si queréis intimidad pon el seguro en la puerta.- Comento mi madre antes de oir sus pies correr por el pasillo-
Laura y yo nos quedamos mirándonos unos momentos… mirábamos el condón en mi mano y la puerta por la que se había asomado mi Madre…. Sus mejillas se sonrojaron y sus labios formaron una sonrisa. Sin poder evitarlo los dos nos estábamos partiendo de risa…
Pasados unos minutos de tanto reír las lágrimas rodaban por nuestros rostros, con un pañuelo limpie las suyas...
-No quiero ver lágrimas en ese rostro tan bello–Comente- Además será mejor que vuelvas a guardar esto antes que nos meta en otro lió –Dije mientras le devolvía el condón y ella lo metía en su bolso- Ya habrá tiempo para ello, ¿no crees?
-Claro que si –Contesto mirando su reloj- Ya es hora de que regrese a casa. Venga acompáñame a la puerta.
Nos levantamos con pereza y la acompañe a la puerta. En el recibidor la detuve un momento y sabiendo que mis padres estarían mirándonos le di un largo beso… Laura muy ruborizada se despidió de mis padres y se marcho a toda prisa. Con decisión me gire y encare la mirada de mis padres…. Pero para mi sorpresa mi madre sonreía, le corría una lágrima por la mejilla. Mi padre me dirigió una larga mirada.
-Me alegro que no hiciese falta tener una conversación contigo hijo –comento mi padre- me siento orgulloso de ti…
Comencé a subir las escaleras con el mayor de los asombros… Me pregunto si algún día llegare a entender a mis padres…
